Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) en Catalunya nacieron el 2017 66.344 niños, 2.564 menos que el año anterior y 4.106 menos que hace dos años. Por lo tanto, este último año, la natalidad ha caído un 3,7%, 8 décimas menos que la media española. Es una tendencia totalmente contraria a la mortalidad, que ha experimentado un aumento del 4,2%, un punto por encima de la media española, y que se ha fijado en 65.931 defunciones, dejando una tasa bruta de 9,1 muertes por cada 1.000 habitantes, ligeramente por encima del 8,8 por término medio estatal.
A pesar de estos datos, el saldo vegetativo en Catalunya, es decir, la diferencia entre nacimientos y defunciones, es positivo en 413, situándose en la primera posición de las 8 comunidades autónomas que disfrutan de esta situación.
Y es que hasta 11 comunidades autónomas tienen un saldo vegetativo negativo, es decir, con más defunciones que nacimientos. Encabezan la lista Galicia, con una saldo de -13.522 y Castilla y León, con un saldo de -13.446. En el ámbito global, los datos del INE recogen que el saldo vegetativo ha sido de -37.713 a todo el estado.
Con respecto a la tasa de fertilidad, en Catalunya es de 1,38 hijos por mujer, ligeramente superior a la media española de 1,31. Por encima, sólo tiene Navarra, Murcia, Ceuta y Melilla. La esperanza de vida en Catalunya también es más alta que la media española de 83,1 años, y se sitúa en 83,4. Madrid, con 84,5 años, encabeza esta clasificación que cierra Ceuta por debajo de los 79, 4.