Desde el momento en que se produjo el atentado del pasado 17 de agosto en la ciudad de Barcelona, la ciudad empezó también a recibir la solidaridad de todo el mundo. Día tras día se podía ver como en La Rambla se acumulaban velas, flores, peluches y también notas de familiares y conocidos en muestra de pésame a las víctimas. Todos estos objetos han estado durante este tiempo en un almacén de la Zona Franca mientras un equipo del Museo de Historia de Barcelona y del Archivo Municipal les limpiaban y catalogaban. Ahora, el Archivo ya ha finalizado las tareas de catalogación y de conservación de los 4.653 mensajes, documentos y notas que había. Según explica su directora, Montserrat Beltran, el objetivo es ahora digitalizar todos estos documentos y, de cara al primer aniversario de los atentados, hacerlos visibles a través de una página web. Entretanto, el gobierno municipal estudia qué memorial físico se puede acabar instalando en La Rambla.

El proceso de limpieza de los documentos ha sido de un mes y medio y ha sido un equipo de seis personas el que se ocupaba de dejar en perfectas condiciones cualquier mensaje, estuviera en una cartulina o en una bolsa de plástico. De hecho, Beltran asegura que dentro de esta recopilación de mensajes hay "desde quien dejaba el libro que estaba leyendo a una nota al verso de un ticket de un centro comercial". Por eso, una vez todos estén escaneados y subidos a la red, "habrá que hacer una selección" por decidir "si se guardan todos o no. Beltran ya ha adelantado que intentarán "mantener la diversidad" de mensajes que hay. Y es que hay notas que expresan "solidaridad, disgusto, impotencia" y otras emociones.

Documents atemptats ACN

Dentro de los criterios para mantener esta diversidad, también tendrán en cuenta las edades de los autores. Eso se debe al hecho de que "hay muchas notas de adultos, pero también muchos documentos de niños" y por eso se quiere dejar plasmado el amplio abanico de edad de las personas que quisieron recordar a las víctimas de La Rambla. Una de las tareas que habrá que hacer en paralelo a la digitalización es traducir todos los mensajes, ya que dentro de la multitud de documentos hay notas en catalán, castellano e inglés pero también en chino, en árabe, en holandés o en alemán. Por eso se pedirá a traductores que traduzcan cada nota para "al menos poder poner un título", dice Beltran.

Docs atemptats 17 A

Memorial digital

Conjuntamente en estos 4.653 documentos habrá que sumar los 13.000 objetos que la gente también dejó en el mosaico de Miró después de los dramáticos hechos del 17 de agosto. Actualmente, el Museo de Historia de Barcelona ya cuenta con 5.000 objetos catalogados, pero ahora todavía faltan 8.000 más. Objetos que van desde los ramos de rosas a los ositos de peluche. La iniciativa de Barcelona es similar a lo que hizo la ciudad de París en el 2015 cuando abrió un portal web en que se pueden consultar algunas de las cartas y notas que la gente dejó en el sitio de los hechos. El memorial digital llegará en el momento en que el gobierno todavía está estudiando qué memorial físico se instala a La Rambla. Ya se ha creado una comisión en que está la representación de varios departamentos municipales, expertos externos y bajo el asesoramiento del Consejo de Arte Público.

Libros de pésame

Aparte de los mensajes que la gente dejó al pie de La Rambla, desde el Ayuntamiento de Barcelona también se abrieron libros de pésame. Si bien había un libro digital, para todos aquellos que llegaban hasta la plaza Sant Jaume también había en formato papel. Se firmaron 102 ejemplares. En todas estas muestras de pésame hay que sumar los libros de otros municipios de Catalunya y del resto del estado español, pero también a los libros de pésame que llegaron de diferentes embajadas y ciudades europeas de carácter más institucional. En total 154 volúmenes de mensajes de todo el mundo en homenaje a las víctimas de Barcelona.