360 pasajeros de Vueling están atrapados en Tenerife y en la capital de Madeira, Funchal, desde el martes por la mañana. Son los pasajeros de dos vuelos entre Barcelona y Funchal que no podrán llegar previsiblemente a su destino hasta el jueves por la tarde.

Concretamente, son 180 pasajeros que cogieron un vuelo sobre las seis de la mañana del martes en el aeropuerto del Prat con destino Funchal y durante el trayecto fueron desviados al aeropuerto de Tenerife Sur por "vientos fuertes cruzados", según han indicado fuentes de Vueling. Y, por otra parte, 180 pasajeros más que tenían que coger el mismo avión a Funchal para ir a Barcelona se quedaron en el suelo.

Las mismas fuentes de Vueling han querido dejar claro que el desvío hacia Tenerife se ha llevado a cabo "por un problema de meteorología y por seguridad aérea" y han indicado que durante el martes y este miércoles no han podido operar el vuelo porque no han mejorado las condiciones meteorológicas.

Finalmente, según aseguran, el vuelo de Tenerife a Funchal está programado para este jueves a las cuatro de la tarde (hora local de Canarias) y en torno a una hora y media después los pasajeros de Funchal podrán coger el mismo avión hacia la capital catalana.

La compañía asegura que no han querido dejar de atender a los pasajeros y, por eso, según apuntan, han puesto un hotel a los pasajeros que se encuentran en Tenerife para que puedan alojarse estas dos noches.

A los pasajeros de la capital de Madeira también se les ha ofrecido un hotel, pero en este caso la compañía no ha encontrado plazas disponibles aunque asegura que abonarán las noches de hotel a los viajeros que hayan podido encontrar plaza de alojamiento. La compañía también ha ofrecido a los pasajeros el reembolso del billete o cambiar el día de vuelo.

Uno de los pasajeros que se encuentran atrapados en Tenerife, Gisela Molas, ha expresado su indignación ante esta conmoción que viven desde el martes, explicando que este miércoles han ido de madrugada al aeropuerto de Tenerife Sur porque, según ella, les habían dicho que podrían coger lo quiere a las siete de la mañana.

Sin embargo, cuando los pasajeros ya habían facturado se han encontrado con que no había personal de Vueling en la puerta de embarque y posteriormente los han informado de que el vuelo saldría a las diez de la mañana y tampoco ha sido así. Finalmente, les han comunicado que los vuelos se habían cancelado de nuevo por malas condiciones meteorológicas. No obstante, Molas ha asegurado que algunos pasajeros que tienen amigos o familiares en Funchal les han dicho que allí están aterrizando aviones.

Requerimiento pedido por la Generalitat

La Agència Catalana del Consum ha enviado hoy un requerimiento a la empresa Vueling para comprobar el cumplimiento por parte de la compañía de sus obligaciones en los vuelos afectados.

Pide también información sobre los porqués de esta situación comprometida, así como los servicios que se han ofrecido a los pasajeros afectados, como por ejemplo facilitarles un teléfono gratuito de contacto con la empresa para incidencias y reclamaciones.

Si en cinco días Vueling no aporta la documentación requerida por la Agencia de la Generalitat, la compañía aérea podría ser sancionada.

Intervención del Síndic de Greuges de Catalunya

Fruto de las múltiples quejas de los afectados por el desvío del vuelo de Vueling, el Síndic de Greuges ha decidido intervenir con carácter de urgencia en este caso.

Se ha puesto en contacto con el Defensor del Pueblo y el Diputado del Común (homónimos del Síndic en el Estado y en Canarias) para que intervengan y hagan un seguimiento de la situación.

Asimismo, el Síndic catalán ha contactado con Vueling, pidiéndole información precisa sobre las circunstancias que han generado este agravio y el motivo por el que todavía no se les ha ofrecido un vuelo alternativo a los pasajeros atrapados en Tenerife y Funchal.