Mochilas y niños que se reencuentran en las escuelas con sus amigos que no han visto durante todo el verano. Esta clásica imagen de cada septiembre, este año, marcado por la pandemia de coronavirus, es el gran reto de los especialistas médicos que quieren garantizar que la vuelta a los centros educativos se pueda realizar con todas las garantías de seguridad y sanitarias, tanto para los más pequeños de la casa como para sus familiares o los docentes.

"La reapertura en las escuelas, institutos y universidades. Es el tema más importante sobre la mesa, porque no se puede mantener la actividad docente cerrada", ha defendido Antoni Trilla, jefe de medicina preventiva del Hospital Clínico. El principal reto es evitar que en los centros educativos haya una gran aglomeración de personas en espacios cerrados, lo que complica la logística para evitar la propagación de la Covid-19.

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Unos jóvenes en un instituto el pasado junio /Sergi Alcàzar

Test masivos

Una de las propuestas es que se realicen test masivos PCR a los alumnos y el personal docente. Ahora bien, Trilla, alerta de que eso no funciona si no se hace de manera continuada. "Estas pruebas PCR te dicen si hoy estás infectado o no, si eres asintomático o no, pero mañana te puedes infectar. Se tienen que hacer seriadas cada semana, que es lo permite que la gente siga sin coronavirus", ha defendido el especialista en una entrevista en RAC1.

Una de las opciones es que estos tests se pudieran realizar de manera masiva el primer día de clase y, a partir de ahí, cuando una persona tiene síntomas tendría que quedarse en casa y hacerse un test para detectar si tiene la Covid-19. "La vuelta escolar tiene una complejidad muy grande de logística", ha señalado Trilla.

Una logística que también es compleja en las grandes ciudades. En este sentido, la realidad que los tests masivos de PCR buscan detectar a aquellas personas que son asintomáticas y, por lo tanto, tienen la enfermedad sin saberlo y pueden infectar a otras personas que no lo son.

Ahora bien, cree que esta experiencia que se ha llevado a cabo en barrios de Ripollet, donde se han hecho test masivos puerta a puerta, o en Sabadell y Terrassa, donde se han instalado carpas, es complicado replicarla en grandes ciudades con un elevado número de habitantes. En este sentido, ha manifestado que se tendría que gestionar bien el volumen de personas, pero "no se puede descartar que estas pruebas se tengan que hacer en el futuro y si se tiene que hacer además mayor escala será más complejo, pero ya tendremos esta experiencia".

Actual situación

Actualmente, según Trilla, "no hay una situación descontrolada en el territorio", a la vez que advierte que se tiene que analizar la situación semanalmente para tomar las medidas de control pertinentes. En el caso de Barcelona, ha expuesto el doctor, se ha registrado un cierto incremento de ingresos en los últimos días, pero que sigue el patrón de otros lugares: personas jóvenes. Por el contrario, ha recordado que en el hospital Arnau de Vilanova, en Lleida, se han podido cerrar las plantas destinadas a atender a enfermos de coronavirus. Por todo eso, ha valorado que, de momento, los sanitarios trabajan "sin una presión excesiva".

Este mes de agosto en que mucha gente se ha marchado de vacaciones, ha recordado que estas "tienen que ser minimalistas". Por eso, ha recordado que se tienen que evitar contactos con personas más allá del círculo habitual y, de esta manera, evitar la propagación del virus.

 

Incertidumbre en otoño

Por otra parte, también ha considerado que la situación en otoño es incierta. Por un lado todo apunta a que habrá un rebrote fruto de la bajada de las temperaturas, por lo que la gente se queda en casa y eso incrementa el riesgo de contagio.

Además, en esta época la Covid-19 también tendrá que convivir con otros virus estacionales de esta época como la gripe. Ante esta situación, ha asegurado que los hospitales ya se están preparando.

Ahora bien, también ha remarcado que la conciencia de las personas frente al riesgo no es la misma que cuando se inició la pandemia.

"En la segunda ola, la población está tomando medidas de protección, también hay gente que ya se ha infectado, los inmunes... Es probable que la propagación del virus no sea la misma. Nos tenemos que preparar para los peores o mejores escenarios", ha afirmado.

 

App para rastreos

El Gobierno ayer presentó una nueva app que permite que las personas conozcan si han estado cerca de una persona que ha tenido algún tipo de contacto con el virus. Trilla ha defendido que es una herramienta útil, pero que es un complemento al rastreo manual. Además, ha asegurado que él mismo se la descargará, ya que garantiza totalmente la privacidad de los datos.

"La gente se llevará una sorpresa de lo próximos que están de personas que pueden ser portadoras", ha sentenciado.