Después de esta etapa tan dura en nuestras vidas como ha sido el confinamiento durante la pandemia, ya va siendo hora de recuperar alguna de las rutinas que nos definen como personas, que nos ayudan a ser más felices y que además son beneficiosas para nuestra salud. Eso sí, sin dejar de lado las nuevas medidas de seguridad que todos debemos tomar para evitar que aparezcan nuevos rebrotes del coronavirus. Las siguientes siete rutinas son pequeños pasos que puedes dar para acercarte más a la felicidad.

Tener vida social

Una de las actividades que todos hemos echado más de menos durante esta etapa en nuestras vidas es la de poder cultivar las amistades presencialmente. Por eso ahora es tiempo de quedar con los amigos otra vez de forma habitual y realizar actividades de ocio frecuente. Es algo fundamental para evitar los síntomas de la ansiedad y la depresión aunque ahora debemos evitar el contacto físico excesivo, así como otros gestos como los besos y los abrazos.

Columpios

El contacto con la naturaleza

Otra cosa que nos ha enseñado a valorar el confinamiento es la necesidad que tenemos de contacto con la naturaleza. La ciencia ha demostrado los beneficios de dar un paseo entre arboles, de pasar un rato al día en un parque o escapar a hacer una ruta a una montaña. Ahora en verano es mucho más sencillo poder hacerlo.

Lectura

Leer es una actividad inspiradora, que educa y entretiene a la vez. Ahora podemos encontrar más tiempo para escoger libros que nos gusten y pasar horas enterrados entre sus páginas.

Hacer ejercicio

Reduce el estrés, la ansiedad y los síntomas de depresión, al tiempo que aumenta la autoestima y la felicidad. Basta con caminar o realizar una actividad de carácter lúdico, como nadar. 

Alimentos que mejoren el estado de ánimo

Hay determinados alimentos como las frutas, las verduras y los cereales integrales que liberan una hormona llamada serotonina. Por otra parte, las proteínas liberan dopamina y norepinefrina, que aumentan la energía y la concentración.

Escribir las cosas buenas que te pasan

Un buen hábito diario consiste en escribir, al final del día, tres buenas cosas que han sucedido a lo largo de la jornada. No es difícil encontrarlas y pueden ayudarnos a cambiar nuestra perspectiva y a acostarnos con un buen pensamiento.

Libreta

Marcarse un objetivo para cada día

Basta con que sea algo sencillo, como llamar a alguien, hacer un favor a un amigo o darse un paseo entretenido. Tener un objetivo al día puede ser una estupenda fuente de motivación para pasar mejor cada jornada.