El ritmo de vida que nos hemos impuesto como sociedad y algunas dolencias crónicas hacen que sea bastante frecuente que suframos tensión y dolor musculares. Las causas más comunes son la práctica de ejercicio físico sin tener un conocimiento específico sobre el mismo, los embarazos, los dolores de espalda y los síntomas de fibromialgia, entre otros.
Las farmacéuticas cuentan con un rosario de medicamentos con propiedades para relajar los músculos –algunos bajo prescripción médica y otros no– al alcance de quienes padecen esta clase de problemas. Aun así, no todo el mundo desea recurrir a ellos y prefiere someterse a relajantes musculares naturales, que existen y sobre los que vamos a referirnos a continuación, ya sean alimentos, suplementos o técnicas a aplicar.
Zumo de granada
Las granadas contienen polifenoles en abundancia y su capacidad antioxidante es hasta tres veces mayor que la del té verde. Asimismo, su zumo puede ayudar a acelerar en los procesos de recuperación muscular.
Arándanos
Estas pequeñas bayas cuentan con unas excelentes propiedades antiinflamatorias. Los arándanos son ricos en polifenoles y antioxidantes y ayudan a mejorar el rendimiento en la actividad física y a disminuir los marcadores inflamatorios.
Cerezas
Este fruto tiene antioxidantes y compuestos antiinflamatorios en abundancia. Un estudio reciente reveló que ayuda a reducir el daño muscular y el dolor después de hacer ejercicio.
Curcumina
Es un colorante natural que procede de la cúrcuma pero que también puede encontrarse en la canela y tiene propiedades antiinflamatorias.
Algunas investigaciones han demostrado que la curcumina puede disminuir los marcadores inflamatorios después del ejercicio. Por lo que incorporarla a la dieta puede ayudar a relajar los músculos.
Aceite de menta
Se trata de uno de los remedios más populares para el dolor muscular. Tomada por vía oral puede aliviar el dolor. Eso sí, no se recomienda para aquellas personas que sufran de problemas hepáticos y biliares.
Magnesio
Este elemento es fundamental para una gran mayoría de las funciones corporales del ser humano. Entre ellas destaca su importancia para que las contracciones musculares tengan lugar adecuadamente.
Los suplementos de magnesio son adecuados en la edad adulta, si bien hay que tener un cierto cuidado en no pasarse en la dosis porque puede provocar problemas estomacales e intestinales.
Además, algunos de los alimentos más ricos en magnesio son las espinacas, las judías negras, frutos secos como los anacardos y las almendras y el exótico edamame.
Proteína
Una cantidad pautada de proteínas para después de practicar ejercicio físico ayuda a reducir la inflamación muscular. Entre los elementos más eficaces para alcanzar este propósito están la proteína de suero y la caseína.
Masaje
Un masaje muscular terapéutico es una de las mejores maneras de aliviar la tensión muscular. Tiene que realizarse por un masajista o fisioterapeuta experto y debe ser firme pero sin llegar a provocar dolor en ningún caso.