En los últimos tiempos, se han producido grandes avances en la detección temprana y las medidas de prevención del cáncer. Cualquier investigación contrastada en este sentido es un paso más que se da en la lucha contra esta enfermedad que produce tantas muertes cada año.

Una de las más recientes ha sido llevada a cabo por expertos de ZZXZ y pone de manifiesto la posible relación entre las infecciones sanguíneas bacterianas anaeróbicas y un mayor riesgo de desarrollar cáncer de colon. El estudio, que se presentará en el Congreso Europeo 2020 de Microbiología Clínica y Enfermedades Infecciosas, puede ser de gran ayuda a la hora de detectar de forma temprana esta enfermedad. 

Microscopio

Según la OMS, el cáncer de colon es el tercero en incidencia en el mundo, por detrás del de pulmón y el de mama. Además de la edad, los factores de riesgo son los antecedentes familiares, la obesidad, falta de ejercicio, una dieta baja en frutas y verduras o padecer determinadas patologías como la enfermedad inflamatoria intestinal. 

En el intestino, al igual que en otras partes del cuerpo humano, residen un tipo de bacterias llamadas anaerobias que, a diferencia de las aeróbicas, no requieren oxígeno para funcionar. Por lo general, no causan infecciones, pero a veces sí que lo hacen. Según los autores de este nuevo estudio, investigaciones anteriores ya habían vinculado tipos específicos de bacterias anaerobias con cáncer colorrectal. Por este motivo, decidieron estudiar más a fondo este posible vínculo con un estudio a gran escala. La investigación se desarrolló en dos regiones de Dinamarca entre 2007 y 2016 e involucró a más de 2 millones de participantes. 

El estudio

Para el análisis, el equipo reunió datos sobre 45.760 infecciones de la sangre, incluida información sobre el tipo de patógenos presentes en el torrente sanguíneo de los participantes.  Luego, compararon esta información con datos de cáncer colorrectal. En particular, buscaron nuevos casos de cáncer colorrectal, especialmente aquellos que se desarrollaron después de una infección sanguínea de cualquiera de las bacterias ya asociadas con el cáncer colorrectal. 

De las 45.760 personas que tenían una infección bacteriana en la sangre, 492 (1,1%) desarrollaron cáncer colorrectal. De estos, 241 (0,5%) se encontraban dentro del primer año de la infección bacteriana de la sangre. Los investigadores compararon cada una de estas personas por edad y sexo con un grupo de control de cinco personas que no habían tenido una infección de la sangre.

Los expertos descubrieron que las infecciones sanguíneas bacterianas anaeróbicas se asociaron con un aumento significativo en el riesgo de cáncer colorrectal. Por ejemplo, aquellos que tenían una infección por Clostridium septicum tenían 42 veces más probabilidades de desarrollar cáncer colorrectal en el próximo año. Solo el 0,5% del grupo control, que no había tenido una infección bacteriana, desarrolló cáncer colorrectal, en comparación con el 20,8% de los que tenían una infección por C. septicum. 

Operación

Los científicos quieren ahora centrarse en analizar las bacterias específicas de las personas que han desarrollado el cáncer para ver si se puede identificar características específicas que podrían estar implicadas en la aparición de la enfermedad. Un hallazgo que permitiría ampliar los modos de detección de este tipo de cáncer tan agresivo.