Nueva Zelanda lleva a cabo una política de covid cero que ahora ha afectado de lleno a su primera ministra. Un brote de solo 9 casos de covid de la variante ómicron por los más de 5 millones de habitantes que tiene el país, el gobierno de Jacinda Ardern ha decretado nuevas restricciones desde este lunes. Así, se han limitado los acontecimientos a 100 personas vacunadas y se ha recuperado el uso obligatorio de la mascarilla en tiendas y transporte público. Todo ha hecho que Ardern se haya visto obligada a aplazar su boda. Lo ha confirmado ella misma en una entrevista, en qué ha asegurado que el hecho de ser primera ministra no la hace "diferente de otros millares de neozelandeses que han sufrido impactos muchos más devastadores por la pandemia", como "la incapacidad de estar con un ser querido cuando está gravemente enfermo". La pareja de Ardern es el presentador Clarke Gayford, muy popular en su país, con quien tiene una hija de tres años.
Como muchas otras parejas los Gayford Ardern se han visto obligados a ir aplazando su boda o adaptarla a la situación epidemiológica. Concretamente, en su caso se comprometieron en el 2019, pero no anunciaron el enlace hasta el año pasado. Entonces, en una entrevista en la emisora nacional Coasta Radio no reveló la fecha exacta. Además, a sus 41 años también aseguró que se sentía "un poco demasiado mayor para tener una fiesta de bodas". Ardern, que es primera ministra de Nueva Zelanda desde el 2017, fue madre en el 2018. Desde entonces, ha agradecido en diferentes ocasiones la tarea de su futuro marido, que ejerce como principal cuidador de la niña. Aunque es muy discreta, la política comparte pequeños detalles de su vida personal a través de Instagram, como los peinados que hace a su hija Nave.
También se hizo viral a las redes un divertido momento entre madre e hija. Ardern se dirigía a los neozelandeses a través de un vídeo en directo, cuando de repente se siente de fondo con un hilo de voz a su hija llamando a su atención: "¡Mamá!." La primera ministra le recuerda que es hora de dormir y le pide que vuelva a la cama mientras le promete que la irá a ver en cuanto acabe el vídeo.
Compromiso
Este compromiso de Ardern con sus ciudadanos contrasta con las fiestas celebradas en Downing Street durante la pandemia, también mientras el Reino Unido estaba de duelo por la muerte del Duque de Edimburgo. Johnson, que asistió a algunas de estas celebraciones en los jardines y oficinas de su residencia oficial, se encuentra entre la espada y la pared, ya que tiene en contra no solo la oposición sino también miembros del partido conservador. Además, aunque los casos de covid siguen disparados por todo el país, para desviar la atención de la polémica, su gobierno ha decidido relajar las restricciones, eliminar la obligatoriedad de las mascarillas y ya ha anunciado que a finales de marzo los positivos no tendrán que hacer una cuarentena obligatoria.