Se ha muerto Antonio Caralps Riera, doctor pionero en trasplantes y exalcalde de Alella, a los 91 años. Eminente nefrólogo, lideró el equipo médico que el año 1965 llevó a cabo el primer trasplante renal exitoso en el Estado español con un órgano procedente de un donante muerto, lo que lo convirtió en figura clave en el desarrollo de la medicina del trasplante renal tanto en Catalunya como en el resto del Estado. La comunidad médica y científica rinde homenaje a su memoria y legado, ya que ha dejado huella en la historia de la medicina catalana y española.

Nacido el 22 de marzo de 1934 en Barcelona, Caralps se licenció en Medicina por la Universitat de Barcelona en 1957. Posteriormente, entre 1960 y 1962, se especializó en nefrología en el Hospital Necker de París. Entonces, ya destacaba por su espíritu innovador y su compromiso con la innovación científica. En 1962, fundó el primer dispensario especializado en nefrología del Estado, en el Hospital Clínic. Este dispensario se convirtió muy pronto en el centro de referencia de esta especialidad.

Al frente del Congreso Mundial de Trasplantes

Fue el 23 de julio de 1965 cuando se llevó a cabo el primer trasplante renal exitoso en el Estado con un órgano de un donante muerto, con un equipo liderado por el mismo doctor Caralps y por el urólogo Josep Maria Gil-Vernet. Fue una intervención histórica, fruto de dos años de investigación y de la aplicación de protocolos experimentales rigurosos, tanto en laboratorio como en modelos animales. El año siguiente, en 1966, presidió el XVI Congreso Mundial de Trasplantes celebrado en Barcelona, reafirmando así su papel de liderazgo en el ámbito de los trasplantes a escala internacional. Entre 1984 y 1989, ocupó la presidencia de la Societat Catalana de Trasplantaments, siendo el primer presidente.

Por sus contribuciones pioneras al trasplante de órganos, le fue concedida la Gran Cruz del Orden Civil de Sanidad, uno de los reconocimientos más altos en el ámbito sanitario en el Estado. Dirigió los servicios de nefrología al Hospital Vall d'Hebron a partir de 1974 y, posteriormente, del Hospital Germans Trias i Pujol, donde trabajó hasta que se jubiló en 1999. Fue autor de 150 publicaciones científicas y de obras de referencia en su campo, como Trasplante renal (1983), Trasplante de órganos y tejidos (1985) y Libro de texto de Nefrología (1994). En 1984 fue nombrado miembro numerario de la Real Academia de Medicina de Catalunya, donde pronunció el discurso de ingreso titulado: “Sobre el proceso de morir y sobre la muerte y su aprovechamiento”. Además, combinó la actividad médica y académica con las funciones a la vida pública, como la de alcalde de Alella (Maresme) entre 1995 y 1999.