Las reuniones navideñas pasarán de seis a diez personas. ¿Ahora bien, en este recuento los niños y niñas menores de 14 años también se incluyen? Este lunes se reúne el Procicat para analizar qué limitaciones se imponen. Si la evolución de los datos de la pandemia es la esperada, se estudiará si los niños y niñas de hasta 14 años se tienen que computar o no, por la baja capacidad de contagio que han apuntado algunos estudios.

El secretario de Salut Pública, Josep Maria Argimon, también va en la línea de excluirlos: "Por su riesgo de contagio es pequeño, y por lo tanto no". Y ha añadido: "No tendrían que contar o podrían no contar. Si abrimos, parece que por el balance se podría". La edad marcada está en los 14 años, aunque Argimon ha dudado, en una entrevista en TVE, de si fijarlo hasta los 13 años de edad. Así pues, todavía se está discutiendo.

Hay que acabar de marcar que las reuniones se podrán limitar a diez personas, excluir este sector de edad y las burbujas familiares aceptadas. El tope en este aspecto se pone en dos pero no se descarta que pueda ser ampliable a tres. Esta línea de trabajo ya la avanzó el conseller de Interior, Miquel Sàmper: "Después de ver el estudio, el tema de eliminar a los niños del número de personas que se pueden reunir se está hablando en el Procicat. Veremos", afirmó en una entrevista en Rac1.

La baja transmisión de los menores

Un nuevo estudio del Vall d'Hebron confirma que los menores de edad son poco transmisores de la Covid-19, ya que sólo un 8% de los pacientes pediátricos con diagnóstico confirmado entre el 1 de julio y el 31 de octubre transmitieron la infección a su núcleo familiar.

El trabajo, realizado a partir de 1.081 menores con PCR positiva y 3.515 contactos familiares diagnosticados, revela que sólo 86 casos contagiaron a la familia. Se trata de la segunda parte de un estudio que ya se hizo durante el periodo de confinamiento (entre el 1 de marzo y el 31 de mayo). Entonces el porcentaje de transmisión era del 3,4%. Además, casi la mitad de los menores son asintomáticos y sólo el 2,5% de los niños estudiados ha requerido hospitalización.

En esta segunda parte del estudio, en 783 casos (72,4% de los casos), se identificó otro miembro de la familia con PCR o diagnóstico microbiológico anterior al del menor, o que claramente tenía síntomas de Covid-19 diagnosticada antes que el menor y en contacto directo con él. Sólo en 86 casos (8%) se determinó, después del estudio de contactos, que el paciente pediátrico había contagiado a otros miembros de su familia. Hay que decir, sin embargo, que en 55 casos adicionales el caso índice era otro menor de la familia (5%).