La osteoporosis es una afección relacionada con la edad que hace que el hueso sea más frágil y más propenso a las fracturas. Aunque esta dolencia es más común en las mujeres, también afecta a muchos hombres.
Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de los Estados Unidos, la osteoporosis del cuello del fémur o la columna lumbar, las formas más generalizadas de osteoporosis, afectan a casi el 25% de las mujeres y a más del 5% de los hombres de 65 años o más en aquel país.
Tras sufrir una fractura relacionada con la osteoporosis, los médicos generalmente recomiendan medicamentos para fortalecer la salud ósea. Algunos de los medicamentos para la osteoporosis que los médicos recetan con mayor frecuencia son los bisfosfonatos de nitrógeno y el etidronato, un bisfosfonato no nitrogenado.
El nuevo estudio sobre osteoporosis y fármacos
Ahora una nuevo estudio del Garvan Institute of Medical Research en Darlinghurst, Australia, ha revelado que el uso de algunos de estos medicamentos –que conduce a tasas de pérdida ósea más bajas– se correlaciona con un riesgo de mortalidad significativamente menor.
El problema, según los autores del trabajo, reside en que muchas personas de las que han sufrido una primera fractura por osteoporosis no siguen tomando los fármacos una vez que han superado el incidente óseo, cuando en realidad deberían hacerlo dado que la fractura se ha producido por una denilidad en los huesos.
Un asunto que es aún más preocupante a raíz de los hallazgos del estudio de los investigadores australianos. El más importante de ellos demuestra que la medicación de la osteoporosis no solo reduce el riesgo de fracturas, sino que también contribuye a reducir las tasas de mortalidad en los siguientes 15 años.
Así se desprende de la lectura de dos documentos de estudio que han publicado este mes, uno de ellos en la revista Osteoporosis International y el otro en Journal of Bone and Mineral Research.
En el primer estudio, los investigadores analizaron los datos de 6.120 participantes mayores de 50 años o que se habían inscrito en un estudio canadiense de osteoporosis multicéntrico. Esta investigación reveló que los participantes del estudio en el grupo de bifosfonatos de nitrógeno, alendronato y risedronato, tenían un riesgo un 34% menor de muerte prematura.
En el segundo estudio, el equipo realizó un análisis adicional, utilizando datos de un grupo de personas que también se había inscrito en el estudio canadiense de osteoporosis multicéntrico. Más específicamente, evaluaron los datos de 1.735 mujeres participantes de más de 50 años. En este caso, excluyeron a los participantes masculinos porque muy pocos cumplían los criterios del estudio.
Esta vez, la investigación reveló que los participantes que tomaron bifosfonatos de nitrógeno tuvieron una menor tasa de pérdida ósea, así como un menor riesgo de mortalidad. Los autores estiman que una tasa menor de pérdida de hueso del cuello femoral, en particular, contribuyó a alrededor del 39% de la reducción de la mortalidad observada en este grupo.
Los investigadores esperan que sus hallazgos recientes puedan alentar a las personas con osteoporosis a tomar en serio sus recetas de medicamentos y seguir los consejos de sus médicos.