La Fundación 'la Caixa' ha acompañado a más de 175.000 enfermos en el final de su vida y más de 239.000 familiares en toda España, desde la puesta en marcha, hace diez años, de su programa de Atención Integral a las Personas con Enfermedades Avanzadas. El programa, que acompaña a los enfermos terminales psicológica, emocional y espiritualmente en el procés final de la vida, ha atendido estos diez años en Catalunya 36.000 personas que se enfrentaban a la fase final de sus vidas.

Estos datos se desprenden del balance hecho público este lunes en Barcelona del programa, que complementa la tarea de las unidades de curas paliativas y la asistencia a domicilio en la tarea de acompañamiento de los enfermos. El subdirector general de la Fundación "la Caixa", Marc Simón, ha recordado que "el objetivo del programa es mejorar la vida de las personas con enfermedades avanzadas y de sus familias", a través de un modelo "que además de atender los ámbitos físico, social, psicológico y espiritual, atiende todo el entorno del paciente".

Los profesionales y voluntarios de los 42 Equipos de Atención Psicosocial (EAPS) distribuidos en torno al país, que colaboran con 128 centros sanitarios y 133 equipos de apoyo domiciliario, atienden pacientes con enfermedades avanzadas que tienen un estado de ánimo malo (73,96%), sensación de sufrimiento (57,68%) o problemas para adaptarse a su enfermedad (73,06%).

Además, según explica la entidad, "el programa tiene muy en cuenta la capacidad cuidadora de la familia, ya que aunque el 95,90% de los pacientes tienen familiares que los acompañan en la enfermedad, estos muchas veces necesitan cierta formación o soporte emocional para seguir adelante con las tareas de cura". En esta línea, el director del Área Sanitaria del Grupo Mutuam, Josep Ballester, ha explicado que "uno de los éxitos del proyecto, más allá de la colaboración de las diferentes entidades, es que se ha conseguido incorporar la dimensión psicológica y espiritual dentro del acompañamiento de los pacientes".

Este soporte, según las conclusiones del estudio, ha permitido que los enfermos atendidos hayan experimentado mejoras en el 90% de los síntomas anímicos y psicológicos, así como el 92% de los atendidos califican de excelente la atención recibida y el 90% asegura que ha podido resolver temas pendientes, especialmente asuntos familiares.

Asimismo, "la Caixa" integra otros proyectos dentro del programa, como EspaiCaixa, pensado para que los pacientes y sus familias puedan relajarse en un entorno más acogedor que el hospital, o el proyecto Final de Vida y Soledad, que pretende acabar con el sufrimiento provocado por la soledad de las personas con enfermedades avanzadas. Otro proyecto a destacar es el desarrollo de la Escuela de Cuidadores, el objetivo del cual es proporcionar conocimientos técnicos y recursos para gestionar las emociones a los familiares de los pacientes para que el entorno de curas sea más óptimo.

Con todo, el programa, que ha destinado durante estos diez años más de 68.000.000 de euros para asistir a las personas con enfermedades avanzadas, ha obtenido el reconocimiento de la comunidad científica internacional, de manera que el Consejo de Europa lo ha señalado como ejemplo de buenas prácticas en atención social y espiritual.