El todavía ministro de Sanidad, Salvador Illa, sigue siendo la voz del Gobierno autorizada para afrontar la pandemia del coronavirus. De hecho, ha admitido que seguirá al pie del cañón hasta que se dé el pistoletazo de salida oficial a la campaña electoral, aunque ya ha dado un mitin y ha concedido unas cuantas entrevistas como candidato a la presidencia de la Generalitat por el PSC: "Desarrollaré mis competencias porque es totalmente compatible".

Así pues, centrándonos en la materia que todavía le corresponde, ha avanzado un dato importante: "Se repartirán 600.000 dosis de la vacuna de Moderna". Y se hará a partir de la semana que viene, de forma escalonada en poco más de un mes, "en las próximas seis semanas". La Agencia Europea del Medicamento (EMA) la consideró ayer lo bastante segura y eficaz para que la Comisión Europea otorgue una licencia de uso condicional para administrarla en personas de más de 18 años.

¿Cómo están las vacunas?

En estos momentos se sigue suministrando la vacuna de Pfizer. Illa ha remarcado que "muy pronto todas las comunidades autónomas cogerán velocidad de crucero" y no le preocupa que este inicio de vacunación haya sido un desastre: "No se trata de competir ni hacer una carrera". Además, tampoco se muestra partidario de retrasar la segunda dosis de esta, ya que el objetivo tiene que ser "cuanto antes, mejor".

Con respecto a la de Moderna, Illa recuerda que habrá un único centro de distribución, y desde allí será el Ministerio quien se encargará de suministrar las dosis para todos los gobiernos autónomos.

Además, subraya que esta vacuna es más fácil de transportar, ya que "se tiene que conservar a -20 ºC, lo que hace que la logística sea menos compleja que con la de Pfizer". En paralelo, recuerda que todavía queda recibir la de Oxford y la de la farmacéutica Johnson & Johnson, de una sola dosis. Pero también ha adelantado que llegará una nueva remesa de Pfizer el mes de marzo.

Objetivos después de primavera

Desde Sanidad, se pide sumar esfuerzos por llegar a los 15 millones de ciudadanos españoles inmunizados en mayo o junio. Así lo ha marcado Illa, que ha dicho que en verano podría haber alrededor de un "70% de la ciudadanía vacunada". Y si nos fijamos en el ahora más inmediato, la tendencia es la misma que la de las voces de las comunidades: "La valoración que hacemos es de muchísima preocupación".

Sin embargo, Illa descarta el confinamiento domiciliario en estos momentos: "No está en nuestra mente ni es una medida que contemplamos ahora mismo". Además, considera que la vacunación y los procesos son factibles con los recursos actuales.

Sin entrar en polémicas ni poner el ejemplo de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, que sí ha contratado los servicios privados de la Cruz Roja, Illa defiende el modelo público al 100%: "No hemos pedido ayuda a ninguna entidad, sabemos que la sanidad pública tiene recursos suficientes para suministrar la vacuna".