Una nueva investigación ha encontrado que las cepas resistentes a los antibióticos de 'Klebsiella pneumoniae', un patógeno oportunista que puede causar infecciones respiratorias y del torrente sanguíneo en los seres humanos, se están propagando a través de los hospitales en Europa, según publican sus autores este lunes en la revista Nature Microbiology.

Se trata de un proyecto europeo multicéntrico con participación española, European Survey of Carbapenemase-Producing Enterobacteriaceae (EuSCAPE), que ha estudiado el problema sanitario que supone la diseminación de esta bacteria, que causa numerosas infecciones nosocomiales (las adquiridas en un centro sanitario) debido a su resistencia a los antibióticos carbapenémicos, una de las familias de antibióticos consideradas de última línea terapéutica. Una de las conclusiones del trabajo es que la propensión de la bacteria a diseminarse en entornos hospitalarios se relaciona con el grado de resistencia a los antibióticos.

En esta investigación, en la que han participado los científicos españoles Jesús Oteo, coordinador en España del proyecto europeo, y Belén Aracil, del Centro Nacional de Microbiología (CNM) del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII), se ha analizado información epidemiológica y secuencias genómicas de 1.717 cepas de esta bacteria, 944 resistentes y 773 sensibles a los carbapenémicos. Han participado 244 hospitales de 32 países europeos, 20 de ellos centros españoles de diferentes comunidades autónomas, bajo la dirección del Centro de Vigilancia de Patógenos Genómicos, situado en Cambridge (Reino Unido). Se trata de la más grande de su tipo y es el primer paso hacia una vigilancia constante de las bacterias resistentes al carbapenem en Europa.

El objetivo era mejorar el conocimiento de las vías de diseminación de bacterias con resistencia a múltiples antibióticos para adecuar las intervenciones de salud pública dirigidas a su control. Oteo explica que las multirresistencias a antibióticos "limitan mucho las alternativas terapéuticas, con casos en los que incluso no hay opción de tratamiento antibiótico. 'K. Pneumoniae' es un paradigma de este problema", señala.

El estudio demuestra que la adquisición de carbapenemasas (enzimas que produce la bacteria para destruir los antibióticos carbapenémicos) es la causa principal de la resistencia a estos antibióticos en 'K. pneumoniae', y que su dispersión en Europa se debe principalmente a cuatro grupos clonales de esta especie. Los autores señalan que la propensión de la bacteria a diseminarse en ambientes hospitalarios está directamente relacionada con el grado de resistencia y que los aislamientos productores de carbapenemasas muestran una mayor tasa de transmisión.

Los autores consideran que los casos de diseminación de 'K. pneumoniae' resistente a múltiples antibióticos están definidos por la expansión de un pequeño número de clones de la esta bacteria productores de carbapenemasas (clones de alto riesgo), que se propagan principalmente por rutas de transmisión nosocomial en los hospitales y que el uso de antibióticos actúa como un factor modificador de la capacidad de transmisión de la bacteria. Además, recomiendan que las acciones de salud pública vayan encaminadas a una mayor vigilancia mediante análisis de genómica bacteriana, y que se centren en el estudio de la expansión de estos clones de alto riesgo en los primeros momentos de una incipiente epidemia.

Oteo recuerda que hay más estudios similares, pero que éste incluye la selección más grande hasta el momento de secuencias genómicas de 'K. Pneumoniae', y de comparación con casos control. Con respecto a la participación española en el proyecto, ha añadido que los 20 hospitales nacionales han aportado gran parte de las cepas resistentes estudiadas, y que el trabajo puede abrir nuevas puertas al manejo de las multirresistencias antibióticas.

Se estima que 341 muertes en Europa fueron causadas por 'K. Pneumoniae' resistente a antibióticos carbapenémicos en 2007; para 2015, el número de muertes se había multiplicado por seis, hasta las 2.094. El alto número de muertes se debe al hecho de que una vez que los carbapenémicos ya no son eficaces contra las bacterias resistentes a los antibióticos, quedan pocas opciones. Los bebés, los ancianos y las personas inmunocomprometidas están especialmente en riesgo.

A la salud pública le preocupa la reciente aparición de un pequeño número de clones de "alto riesgo" que llevan uno o más genes de carbapenemasa, que se han diseminado rápidamente. Se piensa que el uso intensivo de antibióticos en los hospitales favorece la propagación de estas bacterias altamente resistentes, que superan a otras cepas que son más fáciles de tratar con antibióticos.

¿Por qué hay resistencia a los antibióticos?

La doctora Sophia David, primera autora del estudio, con base en el Centro de Vigilancia de Patógenos Genómicos, explica que "el enfoque de 'One Health' a la resistencia a los antibióticos se centra en la propagación de patógenos a través de los seres humanos, los animales y el medio ambiente, incluidos los hospitales. Pero en el caso de 'Klebsiella pneumoniae' resistente a carbapenémicos, nuestros hallazgos implican que los hospitales son el facilitador clave de la transmisión".

"Más de la mitad de las muestras que llevan un gen de carbapenemasa estaban estrechamente relacionadas con otras recogidas en el mismo hospital, lo que sugiere que las bacterias se están propagando desde persona a persona principalmente dentro de los hospitales", advierte.

Las muestras de bacterias resistentes a los antibióticos también tenían muchas más probabilidades de estar estrechamente relacionadas con las muestras de un hospital diferente en el mismo país que en todos los países, lo que sugiere que los sistemas nacionales de salud juegan un papel importante en la propagación de estas bacterias resistentes a los antibióticos.

A pesar de la clara amenaza que representa la 'K. Pneumoniae' el control de infecciones más efectivo en los hospitales, incluida la consideración de cómo se mueven los pacientes entre los hospitales y las intervenciones de higiene, tendrá un impacto.

El profesor Hajo Grundmann, coautor y jefe del Instituto de Prevención de Infecciones e Higiene Hospitalaria en el Centro Médico de la Universidad de Friburgo, admite que son "optimistas de que con una buena higiene hospitalaria, que incluye la identificación temprana y el aislamiento de los pacientes portadores de bacterias, no solo podemos retrasar la propagación de estos patógenos, sino también controlarlos con éxito".

"Esta investigación –prosigue– enfatiza la importancia del control de infecciones y la vigilancia genómica en curso de las bacterias resistentes a los antibióticos para asegurarnos de detectar nuevas cepas resistentes de manera temprana y actuar para combatir la propagación de resistencia a los antibióticos".

Actualmente se está planificando la segunda encuesta de la familia de bacterias 'Enterobacteriaceae' en los hospitales de Europa. Los datos generados están disponibles a través de MicroReact, una herramienta basada en internet y disponible al público desarrollada por el Centro de Vigilancia de Patógenos Genómicos, que ayudará a los investigadores y sistemas de salud a trazar la propagación de la resistencia a los antibióticos en patógenos como 'K. Pneumoniae' y monitorizará cómo están evolucionando.

Finalmente, el profesor David Aanensen, coautor y director del Centro de Vigilancia de Patógenos Genómicos, advierte de que "la vigilancia genómica será clave para abordar las nuevas razas de cepas de patógenos resistentes a los antibióticos que este estudio ha identificado. Actualmente, las nuevas cepas están evolucionando casi tan rápido como podamos secuenciarlos".