El anterior secretario de Salud Pública de Catalunya, Joan Guix, ha admitido este lunes errores en la gestión de la primera ola de la pandemia de la Covid-19 al no conseguir un acuerdo político sobre la misma, ni tampoco comunicar bien a la población y tener demasiados portavoces. En una entrevista en TV3, Guix ha considerado, por otra parte, que "sería necesario" que el gobierno catalán se planteara crear una comisión independiente para saber qué ha pasado durante la pandemia, especialmente en las residencias de personas mayores.

En estos centros, entre en el 2020 y lo que llevamos de 2021 han muerto 4.547 personas a causa de la Covid-19, según los datos de este lunes del Departamento de Salud, que ya ha finalizado la vacunación a los residentes y a las personas que trabajan en las residencias. Según ha recordado sobre los primeros meses de pandemia, "nos dimos cuenta de que las residencias estaban abandonadas relativamente pronto a nivel sanitario y que los protocolos para hacer frente al virus no se adecuaban a las necesidades de aislamiento necesario de las personas infectadas en muchas de ellas.

Joan Guix Assumpta Ricard coronavirus Catalunya EFE

Imagen: Joan Guix durante una rueda de prensa por el coronavirus / ACN

Ha reconocido también que los responsables de gestionar la pandemia en Catalunya durante la primera ola pecaron de "prepotencia" al considerar que el sistema sanitario funcionaba bien pero gracias a la dedicación "de sus profesionales, especialmente los de atención primaria y salud pública". "No teníamos suficientes recursos de personal preparado, existencias de material estratégico o sistemas de información transversales para hacer frente a lo que venía", ha afirmado.

"Problemas de comunicación"

Por otra parte, ha lamentado que también "falló" el liderazgo y se dieron "problemas a nivel de comunicación". En este sentido, ha criticado que no se despolitizó la gestión de la pandemia y que aparecieron "portavoces oficiales y no oficiales de todas partes". Según su opinión, "tendría que haber habido solamente un portavoz" para comunicar a la población lo que pasaba, cuando, de hecho, desde el principio hubo tres consellers del Govern que informaban periódicamente, además del secretario de Salud Pública de forma puntual.

Con respecto al funcionamiento interno del Govern, ha calificado de "discrepancia fuerte" que el expresidente Quim Torra apostara de alguna manera por Oriol Mitjà: "Era una desautorización implícita y no ayudaba de ninguna manera".

También ha considerado "frapant" que no se lo sustituyera hasta pasados dos meses y "no hubiera claramente alguien en el frente de la Secretaría de Salud Pública".