La Organización Mundial de la Salud (OMS) no ha logrado consensuar si el actual brote de coronavirus en Wuhan (China), con más de 440 afectados y 17 muertos, debe o no ser declarado emergencia internacional. El Comité de Emergencia, formado por 16 expertos médicos de diversos países, se dividió al 50 por ciento entre los partidarios y los opuestos a declarar tal alerta, que pondría en marcha sistemas de prevención en todo el mundo, tras largas horas de debate en la sede de la OMS en Ginebra.

"Hubo una buena discusión en el seno del comité, pero quedó claro que para continuarla necesitamos más información", señaló en rueda de prensa el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, quien argumentó que la cautela responde a que "se toman muy seriamente" el brote.

Tedros añadió que un equipo de la OMS continúa trabajando en el foco de la epidemia para seguir las investigaciones sobre el brote, del que aún no se conocen completamente su origen, posibles tratamientos o modos de contagio.

Los expertos de la organización recordaron que hay evidencias de transmisión del virus entre humanos (lo que hace más rápida su propagación), al igual que en anteriores coronavirus como el síndrome respiratorio agudo grave (SARS) o el síndrome respiratorio de Oriente Medio (MERS).

La doctora Maria Van Kerkhova, directora del departamento de enfermedades emergentes de la OMS, subrayó que aunque se sospecha un origen animal del coronavirus (posiblemente en un mercado de pescado y marisco de Wuhan) se siguen analizando ése y otros lugares de venta de alimentos para determinar la causa inicial.

Wuhan, casi aislada

La reunión del Comité de Emergencia, presidido por el francés Didier Hussein, se inició en un día en el que China informó de un fuerte aumento de los casos diagnosticados, precisamente cuando el país se prepara para el anual éxodo de pasajeros debido a las vacaciones de una semana por el Año Nuevo de la Rata (a partir del sábado 25 de enero).

Ante ello, las autoridades de Wuhan han ordenado el cierre de todos los transportes de la ciudad con el fin de frenar la salida de los más de sus más 10 millones de habitantes, incluyendo redes de autobús, metro, ferrys en el río Yangtsé, trenes y aeropuertos.

Al respecto de la drástica medida, Tedros indicó que las acciones de las autoridades chinas muestran su "fuerte compromiso" para contener la situación "con el fin no sólo de controlar su expansión dentro del país sino también internacionalmente".

Cinco alertas globales con anterioridad

La alerta internacional supondría la puesta en marcha de medidas preventivas a nivel global, y en el pasado se ha declarado en cinco ocasiones: ante el brote de gripe H1N1 (2009), los de ébola en África Occidental (2014) y en la República Democrática del Congo (2019), el de polio en 2014 y el de virus zika en 2016.

Los síntomas del nuevo coronavirus, denominado provisionalmente por la OMS 2019-nCoV, son en muchos casos parecidos a los de un resfriado, pero pueden venir acompañados de fiebre y fatiga, tos seca y disnea (dificultad para respirar).

El virus está presente ya en al menos 13 provincias chinas, además de las regiones administrativas especiales de Hong Kong y Macao, que confirmaron este miércoles sus primeros casos, y en el extranjero por el momento se han detectado al menos 4 afectados en Tailandia, y uno en Japón, Corea del Sur, Taiwán y Estados Unidos.

Por ahora la OMS no ha emitido alertas ante los que viajen a China y sólo ha aconsejado a la población general en zonas afectadas medidas higiénicas básicas como lavarse las manos con jabón, cubrirse la boca o nariz al toser y estornudar, o evitar el contacto con personas con síntomas similares a los de una gripe.