El cáncer de páncreas es el más mortal entre los más comunes que afectan a la sociedad. Desde hace 20 años, su incidencia viene creciendo en torno al 1% anualmente mientras que la tasa de supervivencia a los cinco años apenas supera el 10%. El gran problema es que la mayoría de los casos de este tipo de cáncer se diagnostican cuando se encuentra en una etapa avanzada debido a la falta de síntomas específicos en las primeras etapas de la enfermedad y la ausencia de biomarcadores concretos que puedan ayudar a la detección temprana.

Por eso, investigaciones como la que ha realizado un grupo de expertos de la Universidad Queen Mary de Londres, que ha identificado una proteína que podría usarse para ayudar en el diagnóstico del cáncer de páncreas, es importante para encontrar cauces que permitan un diagnóstico más precoz y un tratamiento más efectivo.

Los descubrimientos del nuevo estudio sugieren que una proteína llamada pentraxina 3 (PTX3) puede ser un biomarcador de diagnóstico específico, o una medida biológica, para el cáncer de páncreas, con la capacidad de diferenciar el cáncer de páncreas de otras afecciones no cancerosas de este órgano.

CientíficaLos científicos confían en que el descubrimiento de las propiedades del PTX3 sean importantes para la detección del cáncer de páncreas

En el estudio, los investigadores midieron los niveles de PTX3 en muestras de sangre de pacientes con adenocarcinoma ductal pancreático (PDAC), el tipo más común de cáncer de páncreas, y de voluntarios sanos o pacientes con otras afecciones no cancerosas del páncreas, y encontraron los niveles de la proteína sean significativamente más altos en las muestras de las personas con PDAC.

En concreto, los pacientes con PDAC tenían niveles séricos de PTX3 notablemente más altos que aquellos con neoplasia mucinosa papilar intraductal o pancreatitis crónica, dos afecciones no cancerosas que a menudo se presentan con síntomas similares a los de PDAC, lo que dificulta el diagnóstico definitivo.

Según Hemant Kocher, profesor de cirugía de hígado y páncreas en la Universidad Queen Mary de Londres y director del estudio, “en la clínica, la tomografía computarizada (TC) se usa generalmente en el diagnóstico de cáncer de páncreas. Aunque la TC puede detectar la presencia de una masa pancreática, no puede distinguir el cáncer de páncreas de otras enfermedades pancreáticas no cancerosas. Esto plantea frecuentes dilemas de diagnóstico en la práctica clínica, y actualmente no existen biomarcadores clínicamente aplicables para la detección temprana de PDAC. Los hallazgos de nuestro estudio sugieren que el PTX3 podría usarse como un biomarcador para mejorar el diagnóstico de PDAC y justifica más pruebas para determinar si podría ayudar a la detección temprana de PDAC en la clínica”.

La mayoría de los biomarcadores del cáncer que se utilizan en la práctica clínica para detectar la enfermedad son proteínas liberadas por las propias células cancerosas. Una de las características definitorias de PDAC es que hay muy pocas células cancerosas. El cáncer de páncreas sorprendentemente se compone principalmente de células no cancerosas, que han sido captadas por el cáncer para construir una gran cantidad de tejido cicatricial alrededor del cáncer, proporcionando una fuerte defensa para las células cancerosas.

Al observar los datos de los ensayos clínicos, el equipo encontró que cuando el cáncer de páncreas solo es el objetivo, la PTX3 no parece cambiar con la administración de quimioterapia; sin embargo, cuando se administran medicamentos dirigidos tanto al cáncer como al tejido cicatricial, se observan cambios en los niveles de PTX3. Este cambio en PTX3 se puede medir fácilmente en sangre para controlar cómo está funcionando el fármaco. Por lo tanto, PTX3 puede ayudar a registrar la efectividad del tratamiento mucho antes de que las exploraciones puedan indicar la respuesta al tratamiento.