La dopamina y la serotonina son dos de los neurotransmisores más estudiados de nuestro cerebro. Ambos juegan un papel importante en nuestro estado de ánimo. La dopamina es estimulante y regula los circuitos de premios y recompensas que nos motivan a llevar a cabo determinadas acciones. La serotonina nos ayuda a inhibir el dolor y a calmar el estado de ánimo.
Pero ahora, un nuevo estudio, concluye que tienen más funciones de las que pensaba en un principio. Al parecer, según el equipo de investigadores, estos dos neuroquímicos actúan a velocidades inferiores a un segundo para dar forma a la manera en que las personas perciben el mundo y reaccionan basados en esa percepción. Los investigadores han medido de forma continua y simultánea la actividad de ambos, cuyos receptores son objetivos terapéuticos para trastornos que van desde la depresión hasta la enfermedad de Parkinson, en el cerebro humano.
La dopamina es estimulante y regula los circuitos de premios y recompensas
“Una enorme cantidad de personas en todo el mundo están tomando fármacos para influir en los sistemas de transmisión de la dopamina y serotonina para modificar su comportamiento y salud mental”, aseguran los expertos. “Por primera vez, se ha medido la actividad momento a momento en estos sistemas y se ha podido comprobar cómo están involucrados en la percepción y las capacidades cognitivas. Estos neurotransmisores actúan e integran simultáneamente la actividad en escalas de tiempo y espacio muy diferentes de lo que cualquiera esperaba”.
Una mejor comprensión de estas funciones de la dopamina y la serotonina durante la percepción y la toma de decisiones podría brindar información importante sobre los trastornos psiquiátricos y neurológicos. Existe una gran cantidad de trastornos psiquiátricos y trastornos neurológicos en los que ese proceso se altera en los pacientes, y la dopamina y la serotonina son los principales sospechosos.
La falta de métodos químicamente específicos para estudiar la neuromodulación en humanos en escalas de tiempo rápidas ha impedido la comprensión de estos sistemas. Pero ahora, en las primeras mediciones, los científicos utilizaron un método electroquímico llamado voltamperometría cíclica de barrido rápido, que emplea un pequeño microelectrodo de fibra de carbono que tiene bajos voltajes para la detección en tiempo real de la actividad de la dopamina y la serotonina.
En el estudio, los investigadores registraron fluctuaciones en la dopamina y la serotonina utilizando electrodos especialmente diseñados en cinco pacientes que se sometieron a una cirugía de implantación de electrodos de estimulación cerebral profunda, para tratar el temblor esencial o la enfermedad de Parkinson. Los pacientes estaban despiertos durante la cirugía, jugando un juego de computadora diseñado para cuantificar aspectos del pensamiento y el comportamiento mientras se tomaban las medidas.
La serotonina nos ayuda a inhibir el dolor y a calmar el estado de ánimo
En cada ronda del juego, los pacientes vieron brevemente una nube de puntos y se les pidió que juzgaran la dirección en la que se estaban moviendo. El método ayudó a demostrar que la dopamina y la serotonina estaban involucrados en decisiones perceptuales simples, fuera del contexto tradicional de recompensas y pérdidas. “Estos neuromoduladores desempeñan un papel mucho más amplio en el apoyo al comportamiento y el pensamiento humanos y, en particular, están involucrados en cómo procesamos el mundo exterior”, aseguran los expertos.