Pedro Sánchez ha anunciado en las últimas horas que, en un contexto con los contagios de coronavirus disparados a raíz de los encuentros navideños y de la variante ómicron, finalmente regulará el precio de los test de antígenos. Estas pruebas diagnósticas se venden en las farmacias desde el estallido de la quinta ola y se han convertido en una pieza clave para la detección de la enfermedad en un contexto de desbordamiento del sistema sanitario, especialmente de los CAP.

En las últimas semanas, su demanda ha aumentado exponencialmente, y también lo ha hecho su precio: en algunos establecimientos costaban más de 10 euros la unidad y por internet se revendían por 20. Ahora, según ha anunciado el presidente del Gobierno, se ha decidido regular a su precio, sin especificar cuándo costarán. Esta decisión de Sánchez llega, pero llega tarde. Según la Asociación Nacional de Grandes Empresas de Distribución (Anged), el precio medio en España es un 213% superior al del resto de países europeos. Pero, exactamente, ¿cuánto cuestan estas pruebas por todo el continente?

 

Portugal

Cuando hablamos de test de antígenos económicos, hablamos de Portugal. Allí hace tiempo que se venden a las grandes superficies, hecho que ha provocado la envidia de muchos españoles que han atravesado la frontera para ir a comprar. Estos todavía son más baratos que los test que se venden en las farmacias, donde su precio está fijado a 2,10 euros. Por ejemplo, en cualquier supermercado de Mercadona en Portugal se pueden encontrar antígenos, algo que no se reproduce en los establecimientos españoles. Además, el gobierno del país permite que los ciudadanos se hagan cuatro antígenos gratuitos en farmacias o laboratorios, cifra que aumentó hasta los seis durante el mes de diciembre.

Alemania

Una de las imágenes que ha creado más polémica los últimos días por toda España, donde los ciudadanos tenían que saltar de farmacia en farmacia en busca de un test  de antígenos, es la de cajas llenas de pruebas diagnósticas en supermercados y farmacias alemanas. Allí se venden por 1,75 € por término medio. Además, el gobierno también ofrece a sus ciudadanos pruebas gratuitas, solamente tienen que reservar cita a uno de los centros habilitados para hacérselas.

Francia

En Francia, el gobierno ha regulado también el precio de las pruebas, pero ha fijado un precio más alto que en otros países próximos. Concretamente, el precio máximo de los test en las farmacias es de 6,01 euros. Desde el pasado mes de diciembre, ante un gran aumento de la demanda, está autorizada su venta en supermercados con la condición de hacerlo a precio de coste. Así, se vendían cajas con cinco pruebas por 6,20 €, o una unidad a 1,95 €.

En el Estado, grandes cadenas se han ofrecido a vender los tests en sus establecimientos, para facilitar su distribución, pero de momento el Gobierno se ha negado.

Reino Unido

El Reino Unido ha apostado por los autotests gratuitos, que se pueden recoger en farmacias, bibliotecas, centros médicos... o pedir que la NHS, la autoridad sanitaria británica, les envíen a casa, en paquetes de siete unidades. Además, las escuelas son las encargadas de entregarlos a sus estudiantes.

Sin regular

Hay otros países que no tienen regulados los precios de los antígenos, hecho que provoca que tengan un precio bien similar a los que se dan por todo el Estado. Por ejemplo, en Italia los precios de las pruebas que se venden en las farmacias no se han limitado, pero si el de las pruebas profesionales: máximo 15 euros para|por adultos y 8 para|por niños. En Bélgica, donde también se ha optado por no regularlos, cuestan entre 5 y 10 euros, mientras que la media española, según el Anged, es de 6,5 euros.

Otro país donde el precio de los antígenos no se ha regulado y, por lo tanto, se ha disparado, es los Países Bajos: el coste medio de las pruebas en las farmacias es de 10 euros, todavía más caro que aquí. Situación similar a la de Suiza, donde cuestan una media de 8 euros, aunque algunas marcas los comercializan por hasta 20 euros. En Irlanda, a diferencia de sus vecinos del Reino Unido, el coste no se ha limitado y tiene una media de también 8 euros por prueba en las farmacias, aunque también se venden a los supermercados a un precio más económico.