53 trabajadores de la empresa Maper Carns que hacen de matadores en el matadero de Sabadell han dado positivo por Covid-19. Según el Ayuntamiento, Salut les informó este martes de que después de detectar tres positivos, y como marca el protocolo, hicieron las pruebas PCR al resto de la plantilla detectando 43 positivos más cuando todavía había 35 trabajadores esperando los resultados.

Una cifra de positivos que a estas alturas, según apunta CCOO, ya se eleva a 53. El sindicato asegura que los 53 positivos han obligado a paralizar la actividad en el matadero porque no se están matando animales. También denuncian que se ha llegado a esta situación porque Maper Carns ha incumplido sistemáticamente las medidas de seguridad desde el inicio de la pandemia.

Aunque la dirección del matadero no ha confirmado el cierre del equipamiento, CCOO asegura que ha tenido que detener la actividad porque no se están matando ni terneros ni corderos y la cincuentena de trabajadores restantes "no tienen nada que hacer".

Sin protocolo preventivo

CCOO denuncia que la empresa Maper Carns no ha llevado a cabo ningún protocolo preventivo ni ha aplicado las medidas de seguridad necesarias ante la situación de pandemia de la Covid-19, poniendo en riesgo la seguridad y la salud de sus trabajadores y trabajadoras. Asegura que no ha tomado ningún tipo de medida en los espacios comunes, comedor y vestuarios, para mantener la distancia social, una situación que ha derivado en los contagios.

Delante de este escenario, CCOO anuncia que emprenderá las acciones sindicales y legales oportunas para evitar que esta situación se vuelva a repetir y forzar la empresa a cumplir con las medidas de seguridad y salud que prevé la ley.

A principios de julio, CCOO ya presentó una denuncia contra Maper Carns a la Inspección de Trabajo porque la empresa estaba obligando a la plantilla a compartir algunos equipos de protección individuales (concretamente los cascos, arneses y gafas de protección), así como por incumplir algunos aspectos del convenio, y se hicieron tres jornadas de huelga.

El sindicato señala que después de las movilizaciones la empresa dio a los trabajadores los equipos de protección individual pero que siguió sin establecer protocolos de seguridad en las zonas comunes como el comedor, los vestuarios o la zona de entrada.

El consistorio asegura que se ha activado el sistema de rastreo desde el servicio de vigilancia epidemiológica.