La policía ha desalojado a más de 3.000 personas y ha puesto un centenar de denuncias este fin de semana en Barcelona tanto por hacer botellones como por incumplir las restricciones por la pandemia de coronavirus, según ha explicado el teniente de alcalde de Seguridad, Albert Batlle.
Estas sanciones, ha precisado Batlle, se incrementarán esta noche cuando se implemente el toque de queda, que se prevé que en el caso de Catalunya tenga lugar de diez de la noche a seis de la mañana.
La Guàrdia Urbana desaloja a un grupo de personas haciendo botellón en la playa de Barcelona / ACN
Llamamiendo al civismo
"La actuación será la que estamos haciendo las últimas semanas: apretar mucho para que la gente cumpla las medidas de contención de la movilidad", ha indicado Batlle en declaraciones al 3/24, donde ha manifestado que "no puede ser que noche tras noche se tengan que sacar centenares de personas de los espacios públicos".
Por eso, ha hecho un llamamiento a la "conciencia cívica o solidaria" del conjunto de la ciudadanía para que cumplan las restricciones de movilidad.
"Está claro que no podemos poner ni a un guardia urbano ni a un mosso d'esquadra en el rellano de cada escalera de las calles de Barcelona y lo que tenemos que hacer es apelar a este civismo y a esta conciencia", ha expuesto el teniente alcalde.
Además, ha recordado que las reuniones tanto en el ámbito privado como público sólo pueden ser de seis personas a la vez que ha enfatizado que a la administración no le temblará el pulso a la hora de poner multas. "Cuando haya conocimiento fehaciente de que hay una situación de abuso, pues intervendremos y sancionaremos", ha sentenciado Batlle.
Grupos de jóvenes en la Ciutadella
Por otro lado, ante la imposibilidad de ir a bares o restaurantes, que están cerrados por las restricciones implementadas para frenar la propagación de la Covid-19, cientos de personas han aprovechado el buen tiempo de este domingo para ir a los parques de Barcelona para comer y pasar el día.
Uno de estos es el de la Ciutadella, donde esta tarde decenas de grupos de jóvenes se han encontrado con amigos en el césped, donde han aprovechado para comer o beber, aunque este consumo en el espacio público está prohibido. Además, según ha informado la ACN, la mayoría no llevaba mascarilla y tampoco respetaba la distancia de seguridad. Sin embargo, la mayoría de grupos no superaba las seis personas.
Precisamente este domingo se ha sabido que el Procicat estudiará restringir el acceso a parques y jardines públicos para evitar concentraciones y picnics, dejando sólo abiertas las áreas de juego infantil.