El ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, ha negado la utilización política de la UCO y la UDEF, las unidades especializadas en la lucha contra la corrupción de la Guardia Civil y la Policía Nacional, y las defiende aunque "a veces se produce algún fallo". "Lo que a los ciudadanos les importa es la eficacia de estas unidades, que es alguna cosa que está de sobra acreditado", ha defendido en una entrevista con Europa Press.

"Yo niego la utilización política por parte de la UDEF y por parte también de la UCO", ha asegurado Zoido en alusión a la Operación Catalunya, molesto por que "en algunos casos unos las critican cuando les perjudica y otros las defienden porque perjudica al adversario". "Siempre he defendido -ha añadido- la independencia policial a la hora de investigar y recoger pruebas, y que después sean otros, los jueces y fiscales, los que tengan que valorar".

Las asociaciones profesionales de guardias civiles se han quejado en las últimas semanas de lo que definen como una "campaña de acoso" de determinados sectores contra los investigadores de la UCO. El 3 de julio, el coronel jefe de esta unidad, Manuel Sánchez Corbí, agradeció por carta que se pidiera al Consejo del Instituto Armat que el Ministerio del Interior expresara su apoyo a la UCO.

El ministro recurre a los datos para poner en valor el balance "logrado" tanto de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil como de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la Policía Nacional. En el 2016, recuerda, la UCO consiguió bloquear u obtener efectos valorados en casi 130 millones de euros y la UDEF hizo lo mismo con otros 210 millones. Zoido, que trajo al último Consejo de Ministros antes de las vacaciones de verano un cambio en las prefecturas de los dos Cuerpos (se ha eliminado las figuras de los directores adjuntos operativos), se refiere a las "reflexiones" abiertas en el Ministerio del Interior con el objetivo de ser "muy respetuosos con el marco competencial".

"A veces se produce algún fallo, se producen acusaciones, investigaciones, imputaciones sobre personas que después son absueltas o archivadas," ha señalado, sin citar ningún caso concreto. "A nadie", insiste, "nos gustaría pasar por una situación de estas". Al ser preguntado por Europa Press si tiene ya un plan concreto sobre este tema, Zoido continúa: "No daremos la culpa a nadie en concreto. Un informador tiene este deber informar. Pero todos tendríamos que respetar el secreto de las actuaciones, que comportaría que uno pueda defenderse en mejores condiciones que si se hace público con filtraciones y una interpretación no de acuerdo con lo que haya en el sumario".

Se pregunta al ministro si se está refiriendo a su número dos, el secretario de Estado de Seguridad, José Antonio Nieto, por la polémica en la cual se vio envuelto después de aludir a los fiscales del caso Lezo a una investigación supuestamente filtrada y que mereció una disculpa del fiscal general del Estado. Más recientemente, se ha informado de que el sumario del caso Púnica incluye unas facturas y correos de la etapa en que Nieto era presidente del PP de Córdoba.

"Convive mucho aquí conmigo, lo he visto sufrir, y no le deseo este padecimiento a nadie", ha señalado el ministro, que se remite a las explicaciones dadas por Nieto y por el PP de Córdoba. "Todo está justificado", ha resumido, "yo lo que pido es que, cuando se dan las explicaciones rápido no se siga manteniendo el velo de duda de una posible culpabilidad. Tenemos que ser realmente transparentes cuando damos una explicación, que tiene que ser inmediata".