La Mesa del Parlament ha decidido este jueves rechazar las peticiones de reconsideración que habían presentado a Vox y Ciutadans contra un puñado de propuestas de resolución de los grupos independentistas. Con motivo del debate de política general que se está celebrando esta semana en la cámara catalana, ERC, Junts y la CUP registraron el miércoles a una batería de resoluciones en el eje nacional que reivindican el derecho a la autodeterminación de Catalunya. Los dos partidos españolistas han intentado evitar el debate y votación de estos textos presentando estos recursos ante la Mesa, pero la ofensiva ha fracasado porque el órgano parlamentario los ha tumbado. En total, Vox y Cs han pretendido torpedear, en vano, tres propuestas de resolución de Junts, una de ERC y una de la CUP.

Contra el derecho a la autodeterminación

Por su parte, los ultras han pedido a la Mesa del Parlament que no admitiera dos resoluciones de Junts y una de la CUP. Concretamente, los textos de los de Jordi Turull y Laura Borràs llevaban por título 'El día 1 de octubre, los catalanes decidimos constituir Catalunya en un Estado independiente en forma de República' y 'Preparémonos'. La primera reivindica la memoria de aquella jornada, que describe como un referéndum "legal y legítimo" que "legitima la unilateralidad y la desobediencia". Además, remarca que "solo un mandato surgido de un referéndum de autodeterminación acordado con el Estado español podría sustituir el del referéndum del 1 de octubre de 2017", mientras que la segunda interpela a varias conselleries, además del ejecutivo en general, para que "sigan desplegando planes específicos con el fin de reducir la dependencia de las estructuras políticas y económicas del Estado español, a aumentar la soberanía de Catalunya en todos los campos, y a prepararnos para ejercer el derecho a la autodeterminación".

Con respecto a la propuesta de los cupaires, bajo el nombre 'Independencia para cambiarlo todo, cambiarlo todo para la independencia,' el texto insta a la Generalitat a "no cooperar en la estabilización de las instituciones del Estado". Además, pretende "rechazar la agenda del reencuentro propuesta por el Gobierno y avalada por las organizaciones patronales, y empezar un nuevo ciclo político de conflicto y ruptura con el Estado en la defensa del derecho a la autodeterminación". En los tres casos, Vox argumenta que la autodeterminación no está reconocida en la Constitución y, por lo tanto, considera que admitir una resolución de este tipo sería inconstitucional.

Por su parte, Ciutadans también sitúa en su ojo de mira las mismas tres propuestas que ha intentado hacer pinchar Vox, pero ha añadido dos más: una de Junts y una de ERC. La primera propuesta, bajo el título 'Expliquémonos' busca "persistir en la búsqueda de justicia y reconocimiento en el ámbito internacional", con la intención de generar complicidades por todo el mundo y denunciar la represión del Estado en este escenario. La de los republicanos, 'En defensa de la República Catalana', deja claro que el 80% de los catalanes quieren "decidir democráticamente el futuro político del país" y apuesta por resolver el conflicto con el Estado "por la vía política y democrática". Como los ultras, los naranjas recuerdan que el Tribunal Constitucional se ha pronunciado en contra de admitir pronunciamientos de la cámara a favor del derecho a la autodeterminación.