Los vocales más conservadores del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) han dado un paso atrás y se abren a consensuar un acuerdo para el nombramiento de los dos magistrados del Tribunal Constitucional (TC). Sin embargo, esta concesión tiene letra pequeña, ya que lo harán siempre que se pacten "unas reglas del juego" que les dé tiempo para hacer un pacto. "Después de un intenso debate, hemos concluido que nuestra postura pasa por defender en todo caso la institucionalidad, y que eso impone que llegamos a acuerdos debidamente consensuados", han informado en Efe fuentes del bloque|bloc conservador del ente judicial. De manera que el bloqueo en la renovación del TC podría tener los días condados.

A pesar de todo, las mismas fuentes consultadas por Efe remarcan que, si bien se abren a pactar esta renovación, "para llegar a estos consensos, hay que establecer, como primer paso, las reglas de juego" sobre las cuales trabajar para alcanzar estos acuerdos. Sólo "una vez establecidas, se generará el marco adecuado en que resulta fundamental que se respeten los tiempos de decisión del Consejo.

Todo hace intuir que es posible que la fecha límite del 13 de septiembre que establece la ley para acordar los nombres no se podrá cumplir. El presidente del CGPJ, Carlos Lesmes, ya ha avisado de que, si bien el ideal es que el día 8 se pactan los dos candidatos para llegar a la fecha límite del 13 de septiembre, será difícil porque hay que concitar doce votos favorables.

La desesperanza de Lesmes

El pasado lunes ya trascendía las pocas esperanzas que tenía el presidente del CGPJ con respecto a la renovación de la misma institución. "A estas alturas no tengo ninguna esperanza", sentenció Lesmes después de la toma de posesión del nuevo fiscal general del Estado, Álvaro Garcia Ortiz. El juez advirtió que el bloqueo que se extiende por varios brazos del órgano judicial está haciendo un "daño enorme", ya que el CGPJ en funciones no puede nombrar magistrados del Tribunal Supremo y que la situación de este órgano es "desoladora". "Dentro de no mucho habrá salas que no podrán constituir con regularidad sus secciones", advirtió.

"La situación de la justicia española es desoladora y tiene que ver con la no renovación del CGPJ", afirmó y remarcó que las responsabilidades caen sobre los partidos políticos. Según Lesmes, resulta "de todo punto inaceptable" que se les permita ahora nombrar a los magistrados del Tribunal Constitucional y no los del Supremo. El presidente del CGPJ ha remarcado: "Quince meses después, la situación es de todo punto insostenible e inaceptable".