Cuando se habla de torturas durante el franquismo el primer nombre que seguramente viene a la cabeza es el de Antonio González Pacheco, más conocido como Billy el Niño, y a partir de ahora quizás también vendrá el de José Manuel Villarejo, conocido hasta el momento por ser la mente detrás de la Operación Catalunya, y a partir de ahora quizás también por haber sido un torturador. Eso asegura Público sobre Billy el Niño y Villarejo, y explica que este último era uno de los agentes más temidos de la Brigada Central de Información Social (BIC), la cual operaba en la Dirección General de Seguridad, sede de la actual Comunidad de Madrid.

La BIC estaba dirigida por el temido comisario Roberto Conesa, el cual se encargaba de instruir a los agentes en las técnicas de tortura, agentes como el veterano Billy el Niño y como un joven que en 1975 tenía 24 años llamado José Manuel Villarejo, conocido por los militantes antifranquistas como 'el alemán'. El citado digital ha tenido acceso al expediente de Conesa donde constan los premios, las felicitaciones y las condecoraciones de aquella primera época como policía de Villarejo.

Según los papeles, el verano de 1975 (solo tres años después de haber ingresado en la academia policial) Villarejo ya era subinspector y ya había recibido una recompensa de 25.000 pesetas por su papel en la operación de desarticulación del Frente Revolucionario Antifascista y Patriota (FRAP). De hecho, la Dirección General de Seguridad (DGS) lo propuso para recibir la cruz al mérito policial con distintivo blanco. La citada operación acabó con el fusilamiento de José Humberto Baena, José Luis Sánchez-Bravo y Ramón García Sanz el 27 de septiembre de 1975.

Querella contra Villarejo por las torturas

Julio Pacheco Yepes tenía 19 años el verano de 1975 cuando Villarejo recibió las condecoraciones y ahora ha explicado a Público cómo hace unos años reconoció a uno de sus torturadores: "Enseguida le pusimos el nombre de 'el alemán', y cuando se empezó a hablar de sus escándalos y sus grabaciones resultó que era el famoso comisario Villarejo". Ahora, Pacheco ha denunciado a cuatro agentes de la BIC por crímenes de lesa humanidad en concurso real con delito de torturas, y uno de ellos es Villarejo. "He esperado a que saliera adelante la nueva ley de memoria democrática; podría tener una oportunidad de hacer que se investigue todo, pero no soy muy optimista", confesa.

El denunciante fue detenido el 24 de agosto de 1975 a las 11 de la noche y fue llevado a la DGS, donde fue torturado durante siete días por los cuatro agentes denunciados y algún otro que no ha podido identificar. Julio Pacheco era militante de la Federación Universitaria Democrática Española (FUDE), la cual formaba parte del FRAP. Pacheco también estaba afiliado al Partido Comunista Español Marxista Leninista y se dedicaba a repartir propaganda sobre la situación política.

El denunciante explica cómo lo torturaron a él y a su compañera y apunta que nunca delató a ningún compañero. Pacheco relata que uno de los que lo pegó era Villarejo pero que él nunca lo llegó a interrogar. Finalmente, el denunciante explica la magnitud de las recompensas que se dieron a los agentes que lo torturaron: "Mi padre trabajaba en una fábrica, cobraba 8.000 pesetas al mes el año 1975, ya os podéis imaginar qué suponían las 25.000 pesetas que se llevó Villarejo".