La riada de autobuses que se pudo captar desde el aire ayer por la mañana en Perpinyà certifica el éxito de la convocatoria del Consell per la República. Se esperaban más de 600 autobuses en el recinto ferial de Perpinyà y el colapso fue total. Estos vehículos aparcaron en una zona habilitada conocida como la D617, una doble pista que enlaza Perpinyà con Canet de Rosselló. En las redes sociales ya empiezan a circular imágenes de este momento donde se pueden observar colas kilométricas.

Las imágenes corresponden a los centenares de autobuses estacionados milimétricamente a lo largo de la D617, en doble fila.