La venta de libros en Catalunya ha caído un 10% en octubre y noviembre respecto al año 2016. Según el presidente del Gremi d'Editors, Patrici Tixis, la situación del sector "no es ajena a las circunstancias políticas" y, a pesar de la caída en los últimos dos meses después de la celebración del referéndum de autodeterminación del 1-O, la entidad prevé cerrar el año 2017 con un incremento superior al 2%.

Tixis ha hecho balance del sector editorial catalán en el acto previo a la celebración de la Nit de l'Edició y a la entrega del Premi Atlàntida al editor Jorge Herralde. El presidente de la entidad es consciente de que el sector no es independiente de la situación política que afecta a Catalunya y por eso ha explicado que, en general, "la caída del consumo nos ha afectado bastante". A pesar de reconocer la afectación política del gremio, Tixis también ha sido franco y ha reconocido, al ser preguntado por lo que habría pasado si no se hubiera producido el referéndum, que "quizás habría pasado otra cosa".

Por otra parte, también ha manifestado que espera que sea el cuarto año consecutivo de "crecimiento sostenido" para el sector editorial, después de unas caídas muy fuertes durante la crisis económica, la cual dejó descensos del 30% desde 2008, y ha considerado que el periodo navideño puede suponer un punto de "recuperación de lo que se ha podido perder en estos dos meses".

Piratería, lectura y libros digitales

La gran preocupación del sector editorial es la piratería. En este contexto, Tixis ha celebrado que los datos se hayan reducido de 390 millones de descargas ilegales a 374, pero este sigue siendo uno de los problemas más destacados del sector. El presidente también ha lamentado que el tiempo dedicado a la lectura en Catalunya sea de 22 minutos diarios frente a los 223 de consumo televisivo.

Por último, Tixis ha destacado la consolidación del libro digital en un 5% en el mercado, contra el 95% del libro en papel, y ha hecho énfasis en el papel de la suscripción a abonos de libros digitales —"el Spotify de los libros"— y los préstamos bibliotecarios de libros digitales, con un potencial crecimiento de los libros con audio, ya que el mercado español "tiene unos índices de utilización del podcast más altos de Europa.