Plataforma per la Llengua ha denunciado un nuevo caso de discriminación de la lengua catalana. Los hechos tuvieron lugar en Montmeló (Barcelona) el pasado mes de enero, cuando una trabajadora de Correus se negó a escuchar a Maria, una vecina del municipio, porque hablaba catalán. Según relata la ONG por el catalán en un comunicado, la trabajadora quiso obligar a la mujer a dar las suyas en castellano para poder darle la correspondencia que había ido a recoger.
La situación escaló y, según asegura la Plataforma, la trabajadora insultó a la mujer acusándola de "dictadora". Los hechos llegaron a la organización en forma de queja y posteriormente han denunciado formalmente los hechos reclamante un compromiso de correos con la lengua catalana.
"¡Eres una dictadora!"
Viendo las malas formas y el tono despectivo de la trabajadora de Correos para hablar en catalán, la vecina "no quiso someterse a la imposición lingüística y le hizo saber que expresarse en catalán es un derecho". "Además, se ofreció a facilitarle la comprensión con gestos y una dicción pronunciada", explican en el comunicado.
Sin embargo, la trabajadora no quiso escuchar los datos de la Maria en otra lengua que no fuera la castellana y todavía se puso más agresiva afirmando que "o le hablaba en castellano, o no le entregaba la carta". Incluso, llegó a cogerle la carta de las manos y la increpó verbalmente con frases como "estoy harta de gente como tú" o "eres una dictadora".
La Plataforma per la Llengua ha denunciado formalmente los hechos
A raíz de los hechos, Maria se puso en contacto con la Plataforma per la Llengua a través del servicio de quejas. Gracias a la intermediación de la entidad con los responsables de la oficina de Correos y el concejal de consumo de Montmeló, Albert Montserrat Soldevila, pasados unos pocos días la cartera se presentó en el domicilio de la Maria para pedir disculpas. "Reconoció que no podía ir imponiendo el castellano y, todavía menos, faltó el respeto y agredir verbalmente a una persona por el hecho de hablar su lengua", asegura el comunicado.
"Teniendo en cuenta que demasiados a menudo se repiten este tipo de situaciones con los trabajadores de Correos", la vecina de Montmeló y la Plataforma por la Lengua han denunciado formalmente los hechos y han solicitado a esta empresa pública que se comprometa a garantizar los derechos de los catalanohablantes y que tenga unos protocolos lingüísticos claros.