El resumen de lo que ha dado de sí el congreso de Junts este pasado fin de semana, ha sido la excusa perfecta para repasar otros temas de actualidad que también interesan al gran público. El secretario general de Junts, Jordi Turull, ha asegurado que su partido ha salido "reforzado y consolidado" después de un congreso que ha servido para aprobar las ponencias política y organizativa, en declaraciones a Catalunya ràdio. A partir de aquí, un mensaje a los otros partidos independentistas del Parlament de Catalunya, Esquerra pero también la CUP: "No podemos hacer el juego para acabar teniendo el Parlament al gusto de los de las togas".

El mensaje claro está y refuerza el apoyo a la presidenta del Parlament, Laura Borràs. "El caso Borràs es evidente que no viene del 1-O, pero forma parte del paquete de represiones", ha contestado de forma directa al president Pere Aragonès y el famoso paso al lado que, entre otras, han reclamado de forma explícita la misma expresidenta del Parlament, Carme Forcadell, o la portavoz de los republicanos, Marta Vilalta. Hay que recordar que la Fiscalía pide que la presidenta del Parlament sea condenada a 6 años de prisión y 21 de inhabilitación a cargo público por los delitos de falsedad documental y de prevaricación por su gestión como directora de la Institució de les Lletres Catalanes (ILC) entre los años 2013 y 2017, según el escrito de acusación presentado ante el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC). Así pues, Turull se ha dirigido a los partidos independentistas para pedirles que no contribuyan en la suspensión de Borràs en caso de que se le abra juicio oral por su gestión al frente de la Institució de les Lletres Catalanes: "Sería un error garrafal".

Nadie de Junts se plantea ir a la mesa

El secretario general de Junts también ha negado que haya consellers de Junts que planteen que se tendría que participar. "Los consellers tienen claro que el conflicto es lo bastante importante como para no ir a echar leña", ha añadido. Y ante las dudas, cierra filas: "En el partido no hay debate sobre si hay que sentarse o no en la mesa de diálogo. Es una operación estética para anestesiar al independentismo". Eso sí, niega que Junts sea el partido del no a todo: "El día que quieran hablar de amnistía y autodeterminación y no nos marquen la agenda solo ellos [La Moncloa], nos sentaremos sin problemas". En este sospechar permanente de Junts hay motivos. Como el que ha recordado Turull sobre el anuncio de un pacto de agenda de desjudicialización y que al día siguiente se haga público que PSOE y PP, en paralelo, ya están pactando sobre las euroórdenes para llevar a los exiliados hacia el estado español. De esta manera, ha hecho referencia a la resolución aprobada en el Congreso de los Diputados, a instancias de los populares, que apuesta por reformar las euroórdenes durante la presidencia española de la Unión Europea.

Para acabar, Turull niega que el independentismo haya disminuido y sí admite que hay que volver a motivarlo. "El final del camino hacia la independencia es una DUI, no he oído a nadie que ahora me diga que ha dejado de ser independentista". El famoso cómo se lo harán, sigue siendo la gran pregunta, pero el secretario de Junts asegura que han aprendido de los errores, tienen más conocimientos ahora después del referéndum del 2017 y no hay que desfallecer.