El congreso de Junts ha aprobado esta mañana de manera casi unánime las cuatro ponencias que ha sometido a votación de la militancia y que marcarán la hoja de ruta de la formación para los próximos dos años. La ponencia política se ha aprobado con el 99,7% de los votos, la municipal, 99,37%, la sectorial, con el 99,8% y la organizativa, 90,09%. Asimismo el partido ha designado como presidente del consell nacional el conseller Josep Rull, que ha recogido el 96,2% de los votos.

Esta designación representa el retorno de Rull a la primera línea política, asumiendo el liderazgo del principal órgano del partido entre congresos, que hasta ahora encabezaba Anna Erra. El expreso político de Junts, no ha escondido la emoción al tomar posesión del cargo. "Somos el partido del president Puigdemont, somos el partido del 1-O, el partido que defiende a ultranza la independencia de Catalunya", ha proclamado.

Rull ha explicado que del 1-O se han extraído como conclusiones, que yendo unidos el independentismo es imbatible y tiene una "una fuerza extraordinaria -"si nos llamamos Junts no es por casualidad", ha remachado; y que el Estado español se extraordinariamente "débil, débil, frágil; los fuertes pactan; los débiles imponen, imponen la prisión, el exilio, el espionaje, la guerra sucia".

Ponencias

La ponencia política ya rechazó ayer las enmiendas que reclamaban consultar a la militancia sobre la continuidad en el Govern, y finalmente mantiene el texto original que plantea que una vez se haya cerrado la auditoría sobre funcionamiento del acuerdo de gobierno con ERC se evaluará como responder y "se planteará a las bases la posibilidad de continuar o no en el Govern o tomar otros tipos de iniciativas adecuadas a la situación".

La ponencia de organización ha modificado el reglamento por lo que hace a la suspensión de los militantes condenados o a los que se les abre juicio oral y ha acordado que esta suspensión no estará automática en aquellos casos en que la condena sea por lawfare. De esta manera, el partido blinda a su presidenta, Laura Borràs, en pleno procedimiento contra ella por supuesta fragmentación de contratos a la Institució de las Lletres Catalanas. Este ha sido la comisión que ha chocado con más dificultades para acabar de encajar dentro de la estructura del partido el acuerdo a que llegaron Borràs y el secretario general, Jordi Turull, en Argelers.

La ponencia sectorial reclama suprimir el impuesto de sucesiones y analizar la conveniencia de suprimir el impuesto de patrimonio, mientras que la ponencia municipal evita pronunciarse sobre la continuidad del acuerdo de Junts con el PSC a la diputación de Barcelona, pero deja claro que en el futuro en el caso del acuerdos supramunicipales, mientras haya exiliados y represaliados, "se pactará de forma muy prioritaria" con aquellos partidos que acepten defender el derecho a la autodeterminación, condenen la represión.

El congreso ha aprobado también una veintena de miembros del consell nacional, entre los cuales la abogada Magda Oranich, el defensor del afiliado: Marcel Padrós y los miembros de la Comisión de Garantías, Joaquim Jubert, Mercè Alegre, Maria Antonia Batlle, Héctor López Bofill, Josep Pagès y Magda Oranich