El Tribunal Constitucional ha declarado inconstitucional por unanimidad la ley que regula las asociaciones de consumidores de cannabis y que se aprobó fruto de una iniciativa legislativa popular.

El Constitucional sentencia por unanimidad que el contenido de la norma vulnera las competencias exclusivas del Estado en la materia. Según la sentencia, aunque el cannabis contiene elementos o principios activos para aplicaciones terapéuticas, "no es, en sentido estricto, un fármaco o medicamento, sino una sustancia calificada como estupefaciente, hecho que significa que es una competencia en materia penal reservada en el Estado según el artículo 149.1.6 fe la Constitución".

Los magistrados ya habían suspendido cautelarmente la norma en diciembre del 2017 cuando admitieron a trámite el recurso que había presentado el gobierno de Mariano Rajoy, que consideraba que la norma excedía el ámbito competencial catalán y amparaba legalmente actividades tipificadas en el Código Penal.

Norma pionera

La ley fue una norma pionera que regulaba el consumo, el cultivo y el transporte de cannabis y culminaba una tramitación de dos años y medio desde la presentación de una Iniciativa Legislativa Popular que había conseguido 50.000 firmas. El Parlamento la aprobó con 118 votos de 135, es decir, con los de JxSí, Cs, PSC, CSQP y la CUP. El gobierno de Rajoy, sin embargo, la llevó|trajo al Tribunal Constitucional, que al admitir a trámite el recurso la dejó en suspensión.

Los magistrados cierran la puerta ahora a la ley, que pasa a ser inconstitucional. El TC sostiene que regula una normativa que es competencia exclusiva del Estado. "No sólo contiene un régimen jurídico completo y después de las asociaciones de consumidores de cannabis, sino que este régimen jurídico está dirigido a articular el consumo y cultivo compartido de cannabis o el consumo, abastecimiento y dispensación de esta sustancia sobre la cual el Estado se reserva la disciplina normativa".

El caso vasco

La sentencia, que utiliza parte de los argumentos que esgrimió para tumbar la Ley del País Vasco, también niega que la actividad de los clubs de cannabis se pueda regular mediante la competencia autonómica en materia de asociaciones que recoge el Estatuto, porque el consumo y distribución de cannabis está recogido como un tipo penal definido a la legislación estatal.