Una de las primeras intervenciones que protagonizó el president, Quim Torra, después de tomar posesión del cargo el año pasado fue en las jornadas que el Cercle d'Economia celebra en Sitges. Torra ha recordado esta circunstancia cuando ha tomado la palabra este jueves en aquel mismo escenario y lo ha hecho para denunciar que Catalunya un año después vive "un estado excepción constante que pone en riesgo los valores democráticos".

No sólo eso, ha denunciado que con el gobierno del PSOE se ha mantenido una estrategia represiva que hace imposible una salida democrática y que está teniendo impacto en la vida económica del país.

Quim Torra círculo de economía - Sergi Alcàzar

Por esta razón, el president ha reclamado a los representantes del mundo económico catalán que hoy lo escuchaban que "estén en la primera fila en la defensa de la calidad democrática de las instituciones y en la defensa de aquello que quiere un 80% de la ciudadanía, un referéndum para decidir el futuro político del país". "Les pido que hablen alto y claro, aquí y en Madrid, para hacer saber que están al lado de la radicalidad democrática", ha remachado.

El president ha emplazado a los empresarios a "tomar parte" e "implicarse en buscar la solución transformadora del país". "Es también su responsabilidad. Este país lo tenemos que levantar juntos. Eso no es política. Es una necesidad de país", ha reclamado.

Con una sala en que casi una tercera parte de las sillas habían quedado vacías, la intervención ha sido acogida con los aplausos que marca la más pura formalidad. Acto seguido, se le han planteado diferentes cuestiones por parte de los presentes, cosa que no pasó con Carles Puigdemont cuando se presentó ante el mismo auditorio dos años atrás.

Las preguntas se han interesado sobre la estrategia del Govern para responder a los retos económicos y para superar la "decadencia" provocada por la crisis, pero también sobre cuestiones políticas, entre las cuales, una valoración sobre la presidencia de la Cámara de Barcelona. "Simplemente me limitaré a felicitar a los ganadores", ha respondido Torra, que se ha amparado en la voluntad de defender la pulcritud electoral. La respuesta no ha gustado al presidente de la entidad.

A lo largo de su intervención, el president ha recordado que un año atrás, su gobierno tuvo que recuperar las instituciones suspendidas por el 155 y hacer frente a la fuerza de la represión de un aparato del Estado "en todos sus niveles, incluido el económico".

Quim Torra círculo de economía - Sergi Alcàzar

Ha recogido el informe que ayer presentó el Colegio de Economistas de Catalunya para señalar la responsabilidad del Estado en la marcha de sedes de empresas catalanas y para denunciar las presiones que protagonizaron y el peligro que eso ha representado para la economía, poniendo "en riesgo dos de las principales entidades financieras".

Torra ha denunciado el exilio, la judicialización y la no aceptación de los resultados electorales, que hacen evidente la suspensión de los diputados independentistas encarcelados así como el impedimento que se está planteando para que asuman sus escaños en el Parlamento Europeo. "Si no se para esta estrategia represiva es imposible que se imponga la vía democrática", ha alertado.

En este mismo sentido, ha recordado el informe de las Naciones Unidas que reclama la salida en libertad de los presos y la caída de dos posiciones de España en el eurobarómetro sobre Justicia, hasta la posición 25 de 28 en confianza de la ciudadanía.