La portavoz de Adelante Andalucía, Teresa Rodríguez, fue la primera que criticó en las redes sociales el gag de TV3 sobre la Virgen de Rocío y ahora admite que no habría hecho el tuit si hubiera calculado la "oleada de catalanofobia" que se ha generado. "No pretendía que se originara una polémica contra Catalunya. Me da rabia que mi inocente comentario forme parte de ello", ha dicho en una entrevista en RAC1. También ha negado que en su comentario hubiera una intención electoralista. Y ha insistido en que el gag no le gustó aunque no le parece punible. Rodríguez ha admitido que no supo prever la repercusión de su crítica y ha pedido disculpas. "No era consciente de que alimentaría la catalanofobia. Lo siento si he contribuido a ello", ha añadido.

Rodríguez considera que aunque ella no hubiera hecho el tuit seguramente se hubiera generado la polémica igualmente. Y ha querido dejar claro que su crítica contra el gag no era contra Catalunya. Su intención, según ha explicado, era señalar que puede herir a muchas personas porque la Semana Santa en Andalucía "no es una cosa de la iglesia sino cultural". Este es el tuit que hizo Rodríguez y que generó muchos comentarios catalanófobos:

Juanma Moreno no ha tenido suficiente

Por su parte, el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, ha pedido nuevamente este miércoles "respeto" por Andalucía y ha criticado el gag de TV3 sobre la virgen de Rocío. Según Moreno, "Andalucía respeta a todo el mundo pero sale a defenderse cuando alguien se mofa de nosotros, de nuestras costumbres, acentos y la manera de sentir las cosas". Catalunya, ha dicho, "es una tierra hermana que amamos profundamente", y por eso "nos duele ver cómo una tierra que ha sido tan cosmopolita, abierta y acogedora, hoy está dirigida desde la intolerancia y la falta de respeto a otras tierras de España". Según Moreno, el gag de TV3 "no solo es una mofa sobre la Virgen de Rocío, sino también es una persecución hostil e incluso agresiva, por ejemplo a una enfermera andaluza por expresarse libremente y criticar la obligatoriedad de hablar catalán sin ofender a nadie".

La parodia que ha acarreado tanta polémica se emitió el 4 de abril y consistía en una entrevista a la actriz Judit Martín disfrazada como Virgen del Rocío, con un muñeco que simbolizaba el niño Jesús y que contó con varias mofas sobre la vida sexual, la religiosidad y el acento andaluz. La Junta de Andalucía, incluso, anunció que presentaría una queja formal a la Federación de Organismos o Entidades de Radio y Televisión Autonómicos (FORTA) por el gag del programa.