La sentencia de la causa general contra el independentismo abierta a raíz del caso 1-O podria demorarse más de lo previsto inicialmente y llegar pasadas las elecciones municipales de mayo de 2019.

Así lo avanza La Vanguardia, que apunta que el Tribunal Supremo no dará inicio al juicio hasta principios del año que viene puesto que ya parece harto difícil empezar y cerrar el caso en el año en curso.

En estos momentos, tras la instrucción, el procedimiento se encuentra en una fase intermedia en la que se suceden recursos y peticiones de aplazamiento, lo que llevaría, siempre según el citado medio, a que los miembros del TS apunten ya a empezar el jucio el año que viene. La consecuencia, para nada ajena a la actualidad política, sería que la sentencia llegaría pasadas las elecciones municipales y autonómicas de mayo, ante la habitual costumbre de evitar dar a conocer sentencias en puertas de una convocatoria electoral.