El diario Süddeutsche, uno de los más importantes de Alemania, ha hecho una radiografía de la estrategia que está utilizando el Gobierno español contra el proceso independentista catalán. En su opinión, está buscando una "humillación política".

En un reportaje titulado "Madrid confía en una humillación política dirigida", el gran rotativo de Munich afirma que de acuerdo con esta estrategia, el Tribunal de Cuentas español ha incautado la casa del expresident Artur Mas, como multa por haber celebrado el referéndum del 9 de noviembre de 2014. Según el Süddeutsche, eso "agrava todavía más las tensiones" en Catalunya. Citando observadores políticos de Barcelona, añade que "es un intento de intimidar a los políticos catalanes favorables a una mayor autonomía o a la secesión".

El diario añade que las actuaciones judiciales marcarán el final de la campaña para las elecciones catalanas del 21-D, y remarca la fuerte influencia que el PP tiene en el poder judicial español. "Las duras actuaciones del poder judicial español y del Tribunal de Cuentas, los dos estrechamente ligados a través de muchas personalidades al PP, que está liderado por el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, determinarán la fase final de la campaña", ha indicado.

Süddeutsche hace un repaso de los últimos acontecimientos en Catalunya, desde la situación de los presos, a la retirada de la euroorden contra Puigdemont por parte de España, pasando por el traslado de las obras de Sijena por orden judicial. Refiriéndose a este último hecho, el diario ve también en él la estrategia de humillación. "El procedimiento judicial sobre Sijena no se ha acabado todavía, pero la actual administración gestora de Catalunya impuesta por Madrid, retiró la oposición al traslado. Y desde el punto de vista de muchos observadores, eso es una humillación política deliberada".

 

El diario asegura que sólo existe algo claro respecto a las elecciones del 21-D y es que "no resolverán el problema". En su opinión, hay dos errores en la política catalana y española. "Rajoy bloqueó la reforma del pacto fiscal y la revisión institucional del franquismo. El gabinete de Puigdemont, que se zafó de la detención marchando a Bruselas, creía de forma ingenua que sería posible crear un nuevo Estado con un 40 por ciento de apoyo popular, pero sin el aval de la economía o del extranjero. Y ahora incluso los contrarios a la independencia creen que la detención de políticos catalanes electos y la imposición de multas ruinosas son igualmente perjudiciales para la democracia", apunta.