El Síndic de Greuges de Catalunya, Rafael Ribó, ha puesto en conocimiento de la comisaria europea de Derechos Humanos, Dunja Mijatovic, y de los relatores competentes en la materia de Naciones Unidas las "desproporcionadas" acusaciones de rebelión y terrorismo que se están llevando a cabo contra miembros de los Comités de Defensa de la República (CDR).

Según ha informado en un comunicado, Ribó ha trasladado a las autoridades europeas "las últimas detenciones de personas acusadas de rebelión y terrorismo", después de que la Guardia Civil detuviera el martes a una miembro de los CDR presuntamente por ambos delitos.

El Síndic ha señalado que "las libertades de expresión y de manifestación constituyen derechos fundamentales protegidos por las más altas normas jurídicas nacionales e internacionales y que, aunque estas libertades no son absolutas", sus límites deben estar basados en la ley, buscar fines legítimos y ser proporcionales.

"Las actuaciones perseguidas en este caso por la Audiencia Nacional se deben considerar 'prima facie' como expresión de libertades públicas legalmente protegidas", ha defendido.

La calificación de las actuaciones de los CDR como rebelión o terrorismo resulta, a juicio de Ribó, "manifiestamente desproporcionada, contraria al principio de legalidad y dirigida aparentemente al doble objetivo".

"Por un lado, criminalizar la protesta y provocar un efecto disuasorio de cara a futuras movilizaciones; y, por el otro, permitir a la Audiencia Nacional asumir la instrucción de unos hechos que, en virtud del principio de juez predeterminado por la ley, correspondería a los juzgados de instrucción de los territorios donde se hubieren cometido", ha añadido.