Hay un tema tabú en la política española: los tejemanejes y corruptelas de Juan Carlos I. Esta vez, hemos tenido una buena muestra en el Senado. La Mesa de la cámara alta ha rechazado las preguntas del senador de Compromiso, Carles Mulet, al Gobierno relativas al uso de fondos reservados para pagar a las "amigas sexuales del rey emérito". En cambio, la petición de comparecencia de la vedette y examante Bárbara Rey en la comisión de Interior continúa viva. Pero depende de su Mesa, que muy probablemente la bloquee como ha pasado con tantas otras iniciativas que tienen que ver con Juan Carlos de Borbón.

Después de las últimas informaciones conocidas, el senador de Compromis había registrado la petición de comparecencia y también la siguiente pregunta al Gobierno a responder por escrito: "Ante las noticias que periódicamente aparecen y ahora de nuevo han vuelto a la actualidad, sobre el posible uso de fondos reservados del Estado por el entonces CESID o ahora CNI, u otros organismos o personas en nombre del Estado, para supuestamente acallar las relaciones de personas del mundo del espectáculo con altos cargos del Estado, solicito ser informado de los pagos supuestamente realizados, en qué fecha, la cuantía de estos pagos, en qué conceptos, y a qué personas se han podido beneficiar con estos pagos.".

A pesar de la ambigüedad del redactado, ha sido vetada. El acuerdo de la Mesa de la semana pasada establece que "no se admite a trámite ya que el contenido es contrario a la regulación en materia de secretos oficiales". De esta manera se le ha comunicado al senador Carles Mulet, que tendrá la posibilidad de solicitar su reconsideración. Pero este recurso depende de la misma Mesa que ha vetado la pregunta.

Desde Compromis han denunciado este lunes como "este tipo de preguntas se han venido vetando de forma reiterada por parte de la Mesa del Senado, lo que impide que lleguen" en el Gobierno. "Nos seguimos rigiendo con normas de la dictadura, para esconder este tipo de gastos", ha criticado Mulet en referencia a la ley de secretos oficiales de 1968, que todavía no se ha podido reformar a pesar de las promesas del Gobierno. Y ha remachado: "Después nos vienen con la excusa de que para este tipo de asuntos hay una comisión de Secretos Oficiales en el Congreso, comisión que no está formada por todos los partidos políticos con representación en las Cortes Generales, que no suele reunirse prácticamente nunca, que sus acuerdos o materias tratadas no se pueden hacer públicas de ninguna manera, y donde los asuntos de la Corona y la Casa Real no son abordados".

Mulet ha denunciado el "veto de origen", que considera una "vergüenza" porque "no se permite saber a la población en qué se han gastado sus recursos públicos". Ha recordado cómo se trata de hechos muy graves: "Millones de dinero público para que no nos enteráramos de lo que nos ha costado la supuesta adicción e incontinencia sexual de Juan Carlos de Borbón".