"El Gobierno actual no asume actuaciones del Gobierno anterior". Esta ha sido respuesta el gobierno español de Sánchez a la pregunta del portavoz del PDeCAT en el Senado, Josep Lluís Cleries, sobre el presunto seguimiento de los servicios de inteligencia españoles al presidente Carles Puigdemont en países de la Unión Europea.

Los posibles seguimientos al presidente en el exilio fueron acompañados de polémica porque la Policía Nacional y el entonces gobierno estatal del Partido Popular entraron en contradicción sobre los hechos. Mientras que la Policía Nacional confirmó los seguimientos a través de un tuit —haciéndose una amplia resonancia en la prensa—, el gobierno español lo desmintió.

"Pregunto al gobierno español del Partido Popular si el seguimiento amplio del equipo del CNI (según la prensa) al presidente Puigdemont a Bélgica, a Finlandia y hasta su detención en Alemania se había informado en los diferentes países. El PSOE responde: No asumimos actuaciones del anterior Gobierno", ha escrito el senador Cleries en su cuenta de Twitter.

El 28 de junio, el senador vasco, Jon Inarritu, ya preguntó si las autoridades alemanas tenían conocimiento de este espionaje, cuál fue la colaboración entre las autoridades policiales de los dos países y los medios humanos utilizados para llevarlo a cabo, de qué manera se autorizó la actuación en territorio alemán y cuál era la razón para esperar que Puigdemont entrara a Alemania para pedir que fuera detenido. Unas preguntas que, en aquel momento, el gobierno español desmintió en una respuesta. "Hay que indicar que en el dispositivo de detención de Carles Puigdemont y Casamajó no han participado ni medios técnicos ni humanos españoles".

Ante los hechos, el ministro del Interior de Finlandia, Kai Mykkänen, dejó claro que el posible espionaje del CNI se habría hecho de manera irregular y sin autorización.