El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha abierto la puerta a que España reconozca unilateralmente el Estado de Palestina si no hay acuerdo a la comunidad internacional. Así lo ha destacado este viernes por la tarde desde el paso fronterizo de Rafah, en Egipto, en una comparecencia conjunta con el primer ministro belga, Alexander de Croo, y como presidente de turno del Consejo de la UE.

 

"Ha llegado el momento para la comunidad internacional, sobre todo para la Unión Europea y los diferentes estados miembro, de reconocer el estado de Palestina," ha respondido Sánchez a una pregunta de una periodista, a quien ha dicho que su afán es que el reconocimiento se haga de manera "conjunta". Ahora bien, ha añadido: "Valdría la pena que lo hiciéramos juntos, pero si no es el caso España adoptará su propia decisión". Al margen de eso, el jefe del ejecutivo español ha insistido en una celebración de una conferencia de paz internacional como solución diplomática al conflicto.

Son palabras que ha pronunciado desde el paso fronterizo entre Egipto y la Franja de Gaza, donde ha acabado la gira que ha hecho por este país, Israel y Palestina. En una intervención hecha íntegramente en inglés, el presidente español se ha mostrado muy tajante y ha reclamado a las dos partes en conflicto un "alto al fuego humanitario permanente", el día que se ha puesto en marcha la primera pausa humanitaria que se alargará durante cuatro días.

"Un alto al fuego es un buen paso pero no es suficiente", ha advertido Sánchez, que confía en que sea "el preludio a una solución permanente para allanar el terreno". En este sentido, ha dicho que prevé que parte de la ayuda humanitaria que España enviará a Egipto para atender a los evacuados de la Franja de Gaza, con cuatro toneladas de equipos médicos, empiece a llegar esta misma semana.

Tanto Sánchez como de Croo han podido conocer cómo se está organizando la entrada de ayuda humanitaria a Gaza por este paso, un flujo que se ha multiplicado este viernes por el hecho de que ha empezado la tregua decretada entre las dos partes. Cada día entran de mediana menos de un centenar de camiones de apoyo, pero con la pausa de cuatro días se espera que pueda aumentar de forma considerable.

Con la visita a Rafah, las dos jefes de gobiernos cierran una agenda diplomática que los ha llevado a visitar Israel, Palestina y Egipto. Ante el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, Sánchez se solidarizó con las víctimas de los atentados de Hamás del 7 de octubre, aunque avisó a su homólogo: "Israel tiene el derecho a defenderse pero tiene que cumplir con la legalidad internacional". Antes, en conversación con el presidente del país, Isaac Herzog, el presidente español tampoco se ahorró reproches hacia la actuación en Gaza. "La respuesta no puede implicar la muerte de gente inocente, incluidos miles de niños", se quejó.

Además, se ha reunido en Cisjordania con el presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Mahmud Abbas, con quien abordó la posibilidad de que el ANP se haga con el control de Gaza -actualmente en manos de Hamás- una vez acabe el conflicto. El presidente español considera que este es un paso esencial en su hoja de ruta hacia la paz, y el presidente del ANP se ha ratificado en su disposición a restablecer el control de la Franja. De hecho, ha subrayado que la Autoridad nunca ha abandonado el territorio y sigue pagando servicios públicos, como el agua, la electricidad, la educación y la sanidad.