Pedro Sánchez no le temblará el pulso contra el independentismo. Así lo ha advertido el presidente español este miércoles desde el Congreso de Diputados, donde ha comparecido de manera urgente para hablar sobre Catalunya y sobre el Brexit. Después de referencias a la "vía eslovena" esgrimida por el president Quim Torra, ha lanzado una advertencia a los soberanistas: "Todo lo que se sitúe fuera de la Constitución y el Estatut, contará con la respuesta proporcional pero contundente del estado social y democrático de derecho". De la misma manera, ha amenazado con que, si los Mossos d'Esquadra no actúan contra los CDR, la policía española se volverá a trasladar a Catalunya.

La comparecencia sobre la situación, a petición del PP y los partidos independentistas catalanes, ha arrancado con un Pedro Sánchez que ha cargado contra la "retórica inflamatoria inaceptable", los "mensajes gruesos" y la "dejadez de funciones" del Govern de Torra, que ha considerado "inadmisible".

Después de explicar su experiencia en Bosnia-Herzegovina a finales de los años 90, donde fue "testigo de las consecuencias" de la Guerra de los Balcanes, el presidente español ha denunciado que "reivindicar la vía kosovar o la vía eslovena denota desesperación de quien no tiene ningún argumento más que la mentira". Ha contrapuesto la "vía constitucional", la única que considera posible. "Todo lo que se sitúe fuera, contará con una respuesta firme pero serena", ha reiterado.

El mandatario español también se ha referido a los Mossos d'Esquadra, y ha vuelto a alertar de que "no permitirá cualquier dejadez de funciones". Lo ha hecho refiriéndose a los episodios del pasado fin de semana con los CDR cortando la AP-7, y ha criticado la "inacción injustificable" de determinados cargos políticos. "De persistir su actitud, un número suficiente de fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado se desplazarán para garantizar la seguridad".

A pesar de las "amenazas de algunos elementos radicales", Sánchez ha garantizado que el Consejo de Ministros se celebrará el 21 de diciembre en Barcelona, como se comprometió con el president de la Generalitat. En este sentido, ha anunciado que, durante este encuentro en la capital catalana, se aprobará la subida del salario mínimo a 900 euros.

Si bien el presidente español ha subido el tono contra el independentismo, avisando de que "no aceptaremos ninguna nueva vulneración", ha vuelto a defender que la vía es la del diálogo, y ha hecho referencia a las reuniones de las comisiones bilaterales. En este marco también ha situado los beneficios de los presupuestos del Estado.

Comparación constante con el Brexit

Aprovechando la doble comparecencia, la del conflicto catalán y la del Brexit, el dirigente español ha comparado los dos movimientos de forma constante, especialmente por sus "mentiras". En esta línea, ha denunciado que "el mismo patrón de engaño ha conseguido crispar a la sociedad catalana y española". Las advertencias económicas al Reino Unido, ha añadido, sirven para una supuesta independencia catalana.

Después de la irrupción de Vox, Sánchez también ha defendido que no cederá a las intenciones de recentralización. También ha alertado a los que quieren "pactar con la ultraderecha", a los que ha recordado que "el camino de la igualdad entre los hombres y las mujeres es irreversible, que lo tengan claro los nostálgicos". A Pablo Casado y Albert Rivera les ha exigido "la misma lealtad" que tuvo él desde la oposición al ejecutivo de Rajoy.

Casado, "ventrílocuo" de Aznar

Gran parte del turno de réplica de Sánchez se ha centrado en atacar a Casado y Rivera, tanto por pedir nuevamente la aplicación del artículo 155 como por su posible alianza con Vox en Andalucía. A los dos les ha pedido que "no olviden nunca la proporcionalidad", que es la que "legitima" las decisiones políticas.

Concretamente, al líder del PP le ha dicho que es el "ventrílocuo" del expresidente José María Aznar. "Yo combato con argumentos al independentismo, mientras usted abraza los argumentos de la extrema derecha", ha reprochado el mandatario español.

También ha cargado con dureza contra Ciudadanos, de quienes ha dicho que "es un voto absolutamente inútil y de frustración en Catalunya". Ante las peticiones de elecciones anticipadas del líder de Cs, Sánchez le ha asegurado que el "pacto vergonzante" con Vox hará que su partido sólo "pueda movilizar la España caduca y rancia" en unos hipotéticos comicios.