Pedro Sánchez ha confirmado que su gobierno ya trabaja para revertir los efectos de las reformas que impulsó el exministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, para que favorecieran a grandes empresas a cambio, presuntamente, de pagos a su empresa Equipo Económico, que ahora investiga un juez de Tarragona que lo ha imputado. Sánchez ha asegurado que ya estudian cómo revertir "estos privilegios". Lo que el Gobierno prevé hacer, tal como se había apuntado desde Hacienda y ha garantizado Sánchez, es un análisis detallado, exhaustivo, de las leyes que impulsó Montoro con la intención de favorecer a determinadas empresas. El juez que ha imputado al exministro Montoro investiga si los socios del bufete que fundó, Equipo Económico, crearon un "entramado societario" para desviar fondos obtenidos con su presunta actividad delictiva, que la Guardia Civil y los Mossos sospechan que fue más allá de favorecer a empresas gasistas.
En una conversación con los periodistas en el avión de retorno de su gira latinoamericana, Sánchez ha defendido que no se trata de "competir" con el PP en casos de corrupción, porque aquí los de Núñez Feijóo "ganan por goleada", sino combatir este problema, y aquí el Gobierno desde el primer momento que saltó el caso Cerdán que "hizo fue reaccionar con celeridad y ahora le corresponde actuar a la justicia". Sin embargo, Sánchez ha insistido en que la corrupción generalizada dejó de existir desde la moción de censura que lo llevó a la Moncloa en 2018 y ha criticado la "utilización espuria que se hizo de las instituciones" durante los gobiernos de José María Aznar y de Mariano Rajoy para beneficiar a una élite, haciendo referencia a los casos Kitchen y Montoro.
Sánchez, con "confianza"
Pedro Sánchez ha asegurado que se siente "fuerte" y encara la segunda mitad de la legislatura con "tranquilidad" a pesar de los casos judiciales que afectan a su entorno más próximo, así como a los que fueron sus más estrechos colaboradores en el PSOE, y reivindica que aunque está en minoría parlamentaria ya ha conseguido cumplir el 45% de los objetivos marcados para estos cuatro años. "Julio ha sido mejor que junio, estoy con las pilas cargadas", ha afirmado. El líder de los socialistas, ha reconocido que lo que más rabia le da de los casos de corrupción que han saltado durante los últimos meses es que oscurezcan la extraordinaria tarea que ha realizado el Gobierno, sobre todo en el plano social, tanto dentro como fuera de España, máximamente cuando además se han sacado adelante numerosas medidas a pesar de estar en minoría parlamentaria.
Sánchez traspasa el ecuador de la legislatura, al que se ha llegado este miércoles, determinado a seguir y "sudando la camiseta", tal como ha asegurado en una conversación informal con los periodistas. Sobre el caso Santos Cerdán, ha reiterado que es el momento de la justicia y que hay que dejar que trabajen los jueces, pero ha vuelto a reivindicar que él ha actuado rápidamente y ha tomado decisiones contundentes. Sin embargo, se ha mostrado convencido de que el caso no empañará más su presidencia, a pesar de que ha admitido las dificultades que le ha ocasionado durante el último mes y medio. Después del fracaso del decreto sobre el apagón, Sánchez ha admitido que no es fácil sacar adelante las iniciativas legislativas al estar en minoría y sufrir derrotas. Con todo, ha afirmado que el 45% de los objetivos previstos para los cuatro años de mandato ya se han materializado y que se ha conseguido ganar el 86% de las votaciones en el Congreso.