La propuesta de Josep Borrell como jefe de la diplomacia de la Unión Europea es una "extraordinaria noticia". Así lo ha tratado de vender el presidente en funciones Pedro Sánchez, después de 48 horas de intensas negociaciones en Bruselas que han acabado sin el candidato socialista Frans Timmermans como presidente de la Comisión Europea. A pesar de las cesiones que han tenido que hacer, Sánchez lo ha descrito como un "acuerdo equilibrado" y ha destacado sobre todo el destino del todavía ministro de Exteriores español en funciones.

"España ha vuelto con fuerza", ha proclamado varias veces Sánchez en rueda de prensa desde la capital europea. Ha subrayado que la última vez que el Estado español había tenido un nivel de responsabilidad similar en la política comunitaria fue hace quince años. "España tiene que aspirar siempre al máximo, pero es un resultado extraordinario", ha insistido. Y se ha deshecho en elogios hacia Josep Norrell, a quien ha descrito como "una persona acreditada, con experiencia, en un puesto vital".

En este sentido, ha destacado que el Alto Representante de la UE cuenta con un presupuesto de más de 14.000 millones de euros y que, entre otras cuestiones, se encarga de la diplomacia y la política de defensa comunes. Sus prioridades serán "la defensa del multilateralismo, la política de defensa común y la dimensión exterior de la migración", ha señalado Sánchez.

Rivera contra Macron

Aunque gran parte de la rueda de prensa ha estado dedicada al reparto de los cargos en las instituciones europeas, el candidato a la investidura no ha desperdiciado la ocasión para abordar la actualidad española. Después de que Albert Rivera haya vuelto a rechazar reunirse con él en la nueva ronda de contactos, Sánchez ha contrapuesto su actitud con la de los liberales europeos. "No deja de resultar llamativo que el que se dice mayor representante del partido liberal en España ni siquiera haya tenido un mínimo decoro institucional con la presidencia del gobierno", ha reprochado, contraponiéndolo con las conversaciones fructíferas que ha tenido en Bruselas con Emmanuel Macron.

Por otra parte, Pedro Sánchez no se ha movido en su ofrecimiento a Pablo Iglesias para conformar gobierno: "La oferta del PSOE es clara: un gobierno de cooperación". Y no ha dicho nada más que eso.