Después de las cacerías de marroquíes en Torre Pacheco y de iniciativas antimusulmanas para señalar al PP como una formación xenófoba y aliada de la extrema derecha, Pedro Sánchez ya ha encontrado un nuevo caballo de batalla para desgastar a Alberto Núñez Feijóo este verano: los importantes incendios que queman actualmente en comunidades autónomas gobernadas por los populares (Galicia, Castilla y León, Madrid y Andalucía). El ministro Óscar Puente lanzó gasolina al fuego este lunes y martes cuando empezó a publicar en Twitter bromas sobre las llamas, situando al presidente castellanoleonés, Alfonso Fernández Mañueco, como su principal blanco. El argumento para atacarlo es que ha tardado demasiado en dejar de estar de vacaciones para viajar hasta su territorio y que la gestión de los bosques en esta autonomía ha sido negligente; una estrategia que reabre la herida de la DANA y agita el fantasma de la nefasta gestión del valenciano Carlos Mazón.
"Si un presidente autonómico de mi partido estuviera de farra mientras el pueblo se ahoga, o mientras su territorio se quema, sería destituido de manera automática", escribía Puente el lunes por la noche en las redes sociales, haciendo una equiparación directa entre la catástrofe de la DANA del pasado otoño y los incendios de este verano. Y este miércoles ha vuelto a ello. Ha dicho que en el PP existe un "patrón de conducta", y ha vinculado "el restaurante del Ventorro y la DANA" con los incendios en Castilla y León y que su presidente "tardara cuatro días en dejar las vacaciones y hacer acto de presencia".
Puente ha hecho estas declaraciones en Almería de la mano del ministro de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, que ha dado vía libre a su compañero de ejecutivo para que continuara con sus embates contra el PP. "No daré un paso atrás", ha aseverado el ministro Puente cuando los periodistas le han preguntado por sus polémicos tuits: dijo que "en Castilla y León está calentita la cosa" y culpó de la crisis de los incendios a la ideología de la "libertazz" de los populares, entre otros. El ministro de Transportes y Movilidad Sostenible ha negado que haya "bromeado" con las llamas: "He expresado mi indignación, y a mí me sale expresarla con ironía y sarcasmo".
En esta comparecencia ante los medios de comunicación, Bolaños ha hecho uso de su habitual tono sereno, pero también haciendo comparaciones directas entre los incendios y la DANA que puso fin a la vida de más de 200 personas en el País Valencià. "Este Gobierno no escoge las emergencias, crisis o tragedias; pero sí la manera de afrontarlas; hay que preguntarse si eso lo hacen los gobiernos de todos los colores", ha dicho después de recordar que Pedro Sánchez participó en las reuniones de emergencia la noche de la catástrofe meteorológica valenciana.
La ministra Saiz rechazó hacer sangre con los incendios
La línea de ataque reafirmada este miércoles por Puente y Bolaños difiere de la reacción que tuvo este martes la ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Elma Saiz, a los tuits del ministro de Transportes. En una atención a los medios, fue preguntada por las bromas de su compañero de ejecutivo, y la socialista señaló que "cuando España crema, me encontrarán en la colaboración y no en la confrontación; es momento de estar unidos".
Mañueco evita el choque y Feijóo critica "la falta de altura moral" del PSOE
La respuesta del leonés Mañueco ha sido evitar el choque: "Prescindiré de entrar al juego frívolo de los que son capaces de utilizar el sufrimiento de las personas para tener rédito político". También Alberto Núñez Feijóo se ha pronunciado sobre la polémica. Igual que con la DANA —una negligencia del gobierno valenciano del popular Mazón— ha asegurado que el Gobierno de Pedro Sánchez tendría que haber impulsado una mayor "vigilancia de los bosques", y ha denunciado la "falta de altura moral" del PSOE.