El Departament de Salut ha intensificado las medidas en las residencias de personas mayores "ante la situación actual de elevada transmisión comunitaria". El objetivo es que la Covid-19 no entre en los centros y, si lo hace, se detecte como antes mejor y se limita su incidencia y la mortalidad.
Habrá PCR para los trabajadores, equipos de intervención rápida y se evitarán las salidas de los residentes.
Durante la primera ola la situación en las residencias fue letal. De hecho, la mitad de las muertes en Catalunya fueron en residencias de personas mayores.
PCR
Se prevé reforzar del cribado a los profesionales y se harán pruebas PCR, con recogida de muestra de frotis nasal por autónoma a todos los trabajadores y trabajadoras que no se hayan testado en los últimos 15 días. En los centros residenciales trabajan cerca de 50.000 personas. La autotoma de las muestras será supervisada por una enfermera, médico o responsable higiénico sanitario de la residencia o por profesionales del Equipo de Asistencia Primaria.
También se prevé una intensificación de las medidas de prevención y protección. "Hay que asegurar que todos los centros tienen designado y apoderado un profesional responsable higiénico sanitario que es una pieza primordial para actuar como nexo entre el Departament de Treball, Afers Socials i Famílies, Salut Pública, Atenció Primària y la propia residencia", dice Salut.
Se reforzará la sectorización, los circuitos y el mantenimiento de unidades de convivencia estables. Y se incidirá en la formación con el fin de garantizar que los profesionales de la residencia se mantengan correctamente formados en el uso de los EPI.
PCR
Equipos de intervención rápida
Para dar respuesta efectiva a los brotes en el ámbito residencial, por cada sector sanitario se desplegará un Equipo de Intervención Rápida (EIR) que tiene el encargo de actuar de forma urgente, con coordinación con la dirección del centro. Estos equipos ya estaban en funcionamiento, pero ahora se define mejor su estructura. Hay un total de 18 equipos de intervención rápida por todo el territorio.
Están formados por el delegado territorial o director/a de sector del Serveit Català de la Salut, un representante de Salut Pública, otro de Atención Primària, un representante de Treball, Afers Socials i Famílies, el delegado o delegada en el territorio de residencias y profesionales higiénico-sanitarios.
Las visitas
Las residencias verdes y naranjas tienen que facilitar un mínimo de una visita semanal; además tienen que garantizar hacerlas en horarios compatibles con los horarios de los familiares. Por lo tanto, si así es preciso, se tienen que programar también visitas en fines de semana
Por otra parte, las que se encuentren en rojo tienen que facilitar herramientas telemáticas para comunicarse y dar información a la familia de forma ágil.
La elevada transmisión comunitaria hace que se suspendan por un periodo de 15 días revisables, de manera temporal las salidas cortas de los residentes no autónomos. Por eso, paralelamente se refuerzan las visitas de las familias, siempre haciendo un importante énfasis en las medidas de protección, adaptándolas a los diversos perfiles de los residentes.