Vox no está viviendo sus mejores días. Después de perder 19 escaños el pasado 23-J, pasando de 52 a 33, y la salida de su portavoz en el Congreso y uno de los fundadores del partido de extrema derecha, Iván Espinosa de los Monteros, la situación se empieza a complicar para Santiago Abascal. El hasta ahora portavoz de Vox en el Congreso, alegó "motivos personales" para justificar su retirada, a pesar de que, varios medios apuntan la mala o nula relación con Abascal desde hace meses, ya que, Espinosa de los Monteros se sitúa cada vez más lejos de la cúpula del partido. Con todo, la salida de Espinosa de los Monteros simboliza el final de una era— el año en que el partido celebra su décimo aniversario— y según apunta The Objective, la decisión la tomó después de enterarse de la decisión de la cúpula de sustituirlo en la Cámara Baja por el subsecretario de Institucional del partido, Ignacio de Hoces. Ahora, Abascal está obligado a iniciar una reestructuración profunda, donde tendrán que encontrar a un sustituto como portavoz. De momento, en las filas del partido no hay nadie que sea tan mediático como Espinosa de los Monteros.

Crisis interna en Vox

Santiago Abascal es uno de los pocos miembros del equipo fundador de Vox. En los últimos años, uno de los que ha tomado protagonismo dentro del partido de extrema derecha es el vicepresidente de Acción Política, Jorge Buxadé, que habría ido arrinconando al sector más liberal del partido. Así pues, algunos de los fundadores de Vox han sido apartados después de la acción de Buxadé. Uno de los ejemplos que corrobora esta teoría es el papel secundario que Espinosa de los Monteros ocupó durante la campaña del 23-J, mientras que Buxadé acaparó todo el protagonismo, aunque no era candidato. Según explica El País, en la reunión del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) que se celebró después de las elecciones generales, varios miembros de la cúpula de Vox exigieron responsabilidades en la manera de dirigir la campaña que había provocado la pérdida de 650.000 votos, pero entonces fue Abascal quien paró en seco esta discusión y no dio lugar a ningún tipo de autocrítica. El director de la campaña, a pesar de que, nunca se ha confirmado, era Buxadé.

No es la primera vez que algún exmiembro de Vox asegura que Abascal ha perdido su libertad y las decisiones en Vox no dependen de él. Macarena Olona, que dejó el partido el verano pasado e inició una guerra contra Vox, también afirmó que existía una división dentro del partido, "está el pensamiento conservador de Ortega Smih y Buxadé y el liberal de Espinosa de los Monteros". The Objective explica que fuentes internas de Vox señalan que la personalidad de Abascal se ha diluido a consecuencia de la influencia de 4 miembros de Vox, que son los que dirigen el partido. Ignacio de Hoces, negociador territorial y responsable de confeccionar las listas electorales; Jorge Buxadé, vicepresidente de Acción Política y jefe de campaña; Kiko Méndez-Monasterio, consejero áulico de Santiago Abascal; y Gabriel Ariza, fundador de Espada Comunicación e hijo del dueño de Intereconomía. El secretario general, Ingacio Garriga, también es uno de los hombres de confianza de Abascal.

El PP abre la puerta a Espinosa de los Monteros

La salida de Espinosa de los Monteros de Vox no se ha recibido con sorpresa en Génova. Dirigentes populares ya esperaban la decisión del diputado de Vox, ya que, consideran que cada vez lo veían "fuera del foco" liderado por el sector más radical de Vox. El Español asegura que un ala fuerte del PP considera que Espinosa de los Monteros "es uno de los suyos". Tanto es así que los más centristas le abren la puerta para formar parte del PP.

Dentro del partido de Alberto Núñez Feijóo no solo gustan las ideas de Espinosa de los Monteros, sino también su talante, que siempre ha mostrado en sus intervenciones en el Congreso de los Diputados. Además, apuntan que durante la última legislatura, ha forjado una buena relación con la mayoría de diputados del Partido Popular. Sin embargo, no ha recibido ninguna oferta formal de Feijóo para pedirle que forme parte de su equipo. Con todo, el entorno del líder popular considera que es importante quedarse con votantes de Vox y la manera de conseguirlo es abriendo el abanico ideológico del partido y fichando a dirigentes de Vox compatibles con el PP.