El economista Xavier Sala-i-Martín ha criticado con dureza en el programa Preguntes Freqüents de TV3, la gestión del gobierno del PSOE y Podemos en la crisis del coronavirus, que cree que fundamentalmente ha sido una campaña de marketing donde los planes han brillado por su ausencia. Ha definido la situación como una "catástrofe".

"Han improvisado, y una vez lo han hecho, han intentado obtener ganancias políticas. Recordad qué es lo primero que hizo el Gobierno español: una campaña de marketing. Se gastó 4,5 millones de euros en una campaña que decía Este virus lo paramos unidos. La palabra clave era "unidos". En su cabeza no tenían la pandemia, todavía estaban luchando por la unidad de España y contra el independentismo. Pensaron "ahora los vamos a joder y pondremos aquí la palabra unidos".

"En un momento en que debían de estar comprando mascarillas, estaban con un programa de marketing", ha insistido.

Según Sala i Martín, la segunda cosa que hicieron en el Gobierno "fue dar 14,5 millones de euros a las empresas de televisión privadas para que no los critiquen". "Enseguida se pensaron que estaban en una guerra, donde lo más importante es la propaganda, y en lo primero que pensaron es eso", ha apuntado.

La conclusión del economista es que el Gobierno no planificó nada. "No tenían planes, no tenían ni idea de lo que estaba pasando. La tercera cosa que hicieron fue poner militares delante de todo, y centralizaron todas las decisiones en un señor, el ministro de Sanidad, que hace 35 años que no compra ni una aspirina". "Hace 35 años que el ministerio no tiene competencias en Sanidad", ha recordado.

Según Sala i Martín, el ministro de Sanidad en este escenario ha sido el encargado de ir a comprar material sanitario. "Y le toman el pelo, le roban las mascarillas, le dan tests falsificados. Una cosa tras la otra, hemos visto unos espectáculos dantescos, todo fruto de la improvisación," ha indicado. "La catástrofe ha sido innecesariamente grave", ha añadido.

El economista cree que se tenía que haber dejado ir a comprar a las comunidades autónomas, que eran las que tenían los contactos y los canales de distribución.