No será ni el gobierno español, ni el gobierno catalán quien decida el futuro de Catalunya: serán los catalanes. Insistiendo en esta idea, el presidente de ERC, Sergi Sabrià, ha advertido el jefe del ejecutivo estatal, Pedro Sánchez, que "si alguien se piensa que arreglando Rodalies aporta alguna solución a la situación política no es así".
Lo ha hecho en una entrevista a El matí de Catalunya Ràdio, donde ha querido dejar bien claro que el ideal, según su opinión, sería "dar a la gente cierta estabilidad" e intentar solucionar los problemas que tienen con JxCat, que se evidenciaron la semana pasada cuando el presidente del Parlament, Roger Torrent, acabó suspendiendo el pleno y aplazándolo a principios de octubre por|para la falta de acuerdo|entendimiento entre los dos grupos soberanistas.
Eso sí. Entenderse, y "coordinar la unidad de acción" para "caminar juntos", ha querido subrayar, no es incompatible con "ocupar bien nuestros espacios". Precisamente en este sentido, Sabrià ha asegurado que para los republicanos "Carles Puigdemont sigue siendo el president legítimo", al mismo tiempo que ha aplaudido el trabajo que está haciendo el presidente en el exilio porque considera que la internacionalización de la situación "ha puesto en escaque la justicia española".
Uniformidad Vs. transversalidad
Deseando suerte al Crida Nacional per la República, el presidente de ERC ha puesto encima de la mesa que "es bueno para el país que haya un espacio de centroderecha". Y es que, según su juicio, "si hacemos un llamamiento a la uniformidad se pierde la transversalidad" y, justamente por eso, ha insistido en varias ocasiones en conservar "cada uno sus espacios".
Ahora bien. Sabrià ha criticado que el juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena "intenta alterar las mayorías del Parlamento" y ha abogado para "robar la manera que los diputados procesados no tengan que renunciar en su escaño para recuperar el espacio cuando la situación se revierta".
Sumar es siempre mejor que quedar. En este sentido, el presidente de ERC ha lamentado las discrepancias con JxCat de la semana pasada y ha querido dejar claro que "son episodios que no se tendrían que repetir y que tendríamos que resolver antes de empezar un pleno".