La ministra de Defensa y Asuntos Exteriores en funciones, Margarita Robles, ha señalado este jueves que hasta el día 2 de enero no termina el plazo para que la Abogacía del Estado presente su escrito sobre la sentencia del Tribunal de Justicia de la UE (TJUE) sobre la inmunidad del líder de ERC, Oriol Junqueras, y ha reconocido que no entiende por qué "a todo el mundo le han entrado unas prisas tremendas".

En una entrevista en la Cadena Ser, Robles, magistrada de profesión, ha querido echar "un capote" a la Abogacía para defender que se trata de un proceso judicial "complicado" que requiere "prudencia" y "respeto". "A todo el mundo le han entrado unas prisas tremendas. No sé muy bien por qué, porque el plazo para presentar recursos que ha dado el Tribunal Supremo, no el Gobierno, es un plazo de cinco días", ha defendido.

En este sentido, Robles ha avisado, "como jurista" que es, de que "los plazos pueden apurarse hasta el final". "Que todo el mundo tenga la máxima conciencia de que el Gobierno tienen el máximo respeto a la Fiscalía y a la Abogacía del Estado", ha apostillado.

Además, ha asegurado que no existe ninguna "explicación política" al hecho de que la Abogacía todavía no se haya pronunciado, y ha insistido en que los procedimientos judiciales como este son complicados y que "la prudencia es algo muy recomendable".

Según Robles, en ERC también saben que "los procedimientos judiciales no tienen nada que ver con los procedimientos políticos", porque tienen en su ámbito "juristas importantes". "Dejemos que los procedimientos judiciales sigan su cauce. Máximo respeto al Tribunal Supremo, y sin duda a la Fiscalía y a la Abogacía del Estado", ha remarcado.

Asimismo, ha querido recordar que fue el Tribunal Supremo el que planteó al TJUE una cuestión prejudicial sobre la situación de Junqueras porque tenía "serias dudas", y el que ahora ha dado cinco días hábiles de plazo a las partes para que presenten sus alegaciones.

En esta línea, ha defendido que las resoluciones del tribunal europeo "forman parte de la jurisprudencia española", frente a aquellos que "se rasgan las vestiduras" por su decisión sobre el líder de ERC.