"Es muy difícil que la CUP llegue a aprobar unos presupuestos de este Govern con el programa que plantea". Es lo que ha expuesto el diputado cupaire Carles Riera en una entrevista en Catalunya Ràdio poco antes que empiece la segunda vuelta para investir el candidato Quim Torra. Este domingo la CUP celebró un consejo extraordinario donde decidió que mantendría las cuatro abstenciones para facilitar la investidura de Torra.

Con esta advertencia sobre los presupuestos, Riera ha insistido en que su militancia "ha decidido en esta situación represiva y de excepcionalidad" que no se podía bloquear el inicio de la legislatura, "pero eso no quiere decir apoyo a Torra", ha puntualizado. El cupaire ha puesto mucho énfasis en el programa que adoptará el nuevo Govern de la Generalitat, un programa que no gusta a los anticapitalistas: "El nombre del candidato no era relevante, sólo el programa nos podía hacer modificar la decisión".

La CUP cree que el programa de Quim Torra no es "lo bastante republicano" y que por lo tanto no casa con el proyecto "inclusivo y antifascista de la formación". Sobre si su grupo ha llegado a algún tipo de pacto con el futuro Govern, Riera ha asegurado que no aunque ha recordado que el 30 de enero (cuándo se tenía que investir al presidente Puigdemont) sí que había un acuerdo.

"El 30 de enero el TC dijo que la investidura de Puigdemont no era legal y la presidencia del Parlament le hizo caso". Este fue el momento en que los cupaires decidieron que a pesar de no "entrar en nombres se exigiría un programa republicano" a cambio de su apoyo.

Durante la entrevista, Carles Riera ha aprovechado para pedir al gobierno de Torra el inicio de un proceso constituyente y un debate social "donde participe todo el mundo para hablar de qué país queremos en este nuevo ciclo político". Como ya es habitual en la formación, el cupaire ha hecho un llamamiento a la desobediencia subrayando que el pasado 27 de octubre ya se desobedeció: "la muestra de la desobediencia son los presos políticos y los exiliados". Es por eso que Riera ha animado a mantener esta desobediencia ya que "el Estado no quiere dialogar" y "los grandes cambios democráticos comportan asumir represión".

Finalmente, el diputado ha indicado que "si hay ruptura con el Estado hablaremos con el Govern y nos implicaremos". Es su condición porque aseguran que no llevan años luchando por la independencia por ahora sólo recuperar la autonomía.