Los nuevos presidentes de la Generalitat y del gobierno español se deben favores y se piden diálogo, situación que tiene que permitir, cuando menos, cambiar las relaciones entre los ejecutivos catalán y español. Es como lo ve Le Monde, el influyente diario de referencia del centroizquierda francés, en una crónica titulada "La revancha de los independentistas catalanes con Rajoy". La "sensibilidad política de Pedro Sánchez le acerca a los defensores de un nuevo anclaje de Catalunya en España", explica el Monde, mientras Quim Torra, en la toma de posesión de su Gobierno, este sábado, se ha dirigido a su homólogo español pidiéndole una vez más "sentarse y hablar, tomar riesgos".
La corresponsal del diario presenta la secuencia de acontecimientos como la alineación positiva de los astros. Torra acepta retirar del Gobierno a los consellers presos y exiliados "pese a la ira de la poderosa Assemblea Nacional Catalana". Los votos de los independentistas "fueron indispensables para hacer caer Rajoy" y propulsar a Sánchez a la presidencia del gobierno de Madrid. Este sábado toma posesión el nuevo Govern y decae el 155, y también es el día que Pedro Sánchez promete el cargo de presidente del gobierno español. Nada es causal —pero todo encaja.
Dificultades
El diario no se olvida, sin embargo, de explicar las dificultades del desafío. El nuevo presidente del gobierno español "ha demostrado ser gran defensor de la unidad de España y fiel aliado de Rajoy a la hora de poner las instituciones catalanas bajo tutela, y ha descrito a Torra como un "racista" y "el Le Pen de la política española". Quim Torra, a su vez, avisó el viernes pasado: "El PSOE ha sido cómplice en la represión. (...) Seremos muy exigentes con Pedro Sánchez", para volver a pedir "diálogo urgente".
Un ejemplo de las dificultades, explica Le Monde, son los presos políticos. "Joan Tardà (ERC), ha adelantado que la primera solicitud del ejecutivo catalán será acercar los prisioneros a Catalunya. El líder socialista catalán, Miquel Iceta, hombre próximo a Sánchez, ha respondido de que la decisión 'deberán tomarla los jueces y los jefes de instituciones penitenciarias'".
Sánchez, recuerda el diario, ha aprovechado estos tres últimos días para diferenciarse del bloque del 155. "Creo que España es una nación donde hay territorios que también se sienten una nación", dijo [Sánchez] en la moción de censura a Mariano Rajoy. [También] prometió trabajar para 'normalizar' las relaciones entre Madrid y el nuevo gobierno catalán y reanudar el diálogo".